Strongyloides westeri es un nematodo intestinal que suele infectar a los potros jóvenes y se ha asociado con enteritis de intestino delgado, dando lugar a diarrea. Sin embargo, la patogenicidad del parásito no está clara. El parásito es único entre los helmintos equinos por tener tres posibles vías de transmisión: lactogénica, oral y percutánea. Además, puede completar todo el ciclo biológico en el medio ambiente sin entrar en un hospedador. La vía lactogénica se considera la más importante en los potros, pero se han observado reacciones cutáneas y un comportamiento hiperactivo en respuesta a la invasión percutánea de las larvas. La ivermectina y el oxibendazol son eficaces contra los estadios intestinales en potros, pero no está claro si la desparasitación de las yeguas próximas al parto tiene algún efecto sobre la reducción de la transmisión lactogénica.
Cortesía del Dr. Martin K. Nielsen.
Strongyloides westeri se da comúnmente en potros de todo el mundo. Existen pocos estudios de prevalencia a gran escala, pero los huevos de Strongyloides se pueden encontrar típicamente en las heces del 5-50 % de los potros tratados que tienen <2 meses de edad. Se cree que la transmisión lactogénica es la vía de infección más importante en los potros jóvenes. Las yeguas albergan larvas en una fase hipobiótica detenida en sus tejidos, que se reactivan al parir y migran a la glándula mamaria. Las larvas pueden aislarse en la leche a los 5 días posparto, pero la concentración más alta se produce a los 10-14 días posparto. Las larvas se han identificado en la leche hasta ~45 días después del parto. Se ha descrito potros positivos en el recuento de huevos a los 5 días de edad.
Existen otras dos vías de infestación para este parásito, la ingestión oral y la invasión percutánea, pero se desconoce la importancia de estas vías. Se cree que los parásitos obtenidos por cualquiera de estas vías experimentan una migración tisular que los lleva a través de los pulmones, mientras que los parásitos adquiridos por vía lactogénica no migran fuera del intestino.
Dos características adicionales separan S westeri de otros helmintos intestinales de los caballos; el nematodo es un parásito facultativo, porque puede completar y mantener su ciclo biológico sin entrar en un hospedador, y solo las hembras son parásitas.
Signos clínicos de la enfermedad asociada a Strongyloides westeri en caballos
Una vez se especuló que Strongyloides westeri era la causa de la "diarrea por celo del potro", porque esto se observa a menudo alrededor de los 10 días después del parto, cuando una proporción de los potros puede ser positiva en el recuento de huevos fecales. Sin embargo, es probable que otros patógenos intestinales estén implicados en la enfermedad a esta edad.
No obstante, el parásito se ha asociado con enteritis del intestino delgado con diarrea, aunque no se ha descrito un síndrome clínico distintivo. Los estudios epidemiológicos sugieren que la enfermedad puede ocurrir si los recuentos de huevos de Strongyloides superan los 2000 huevos/g, y las inoculaciones experimentales con el parásito han dado lugar a enteritis del intestino delgado.
La vía de infestación percutánea puede causar dermatitis en las extremidades distales, y se ha descrito un comportamiento hiperactivo y "frenético" en los animales de un año expuestos a un entorno infeccioso.
Diagnóstico de la enfermedad asociada a Strongyloides westeri en caballos
Cortesía del Dr. Martin K. Nielsen.
La flotación fecal o el recuento de huevos fecales permiten la identificación de los huevos de Strongyloides. Son huevos de estróngilos ovoides, pero más cortos y de paredes más delgadas y a menudo contienen larvas. Debido a que tienen paredes delgadas, los huevos tienden a colapsarse en medios de flotación con densidades específicas superiores a 1,25, por lo que se recomienda ~1,20.
Tratamiento de la enfermedad asociada a Strongyloides westeri en caballos
Las fases intestinales del parásito son sensibles a la ivermectina (0,2 mg/kg) y al oxibendazol (15 mg/kg). No hay informes de resistencia antihelmínitca en este parásito.
Prevención de la enfermedad asociada a Strongyloides westeri en caballos
La desparasitación de las yeguas en periparto es muy utilizada por los administradores de granjas y los propietarios de caballos en un intento de prevenir la transmisión lactogénica, pero se desconoce la eficacia de este procedimiento. No hay datos disponibles sobre la eficacia de los antihelmínticos disponibles frente a las fases tisulares migratorias dentro de la yegua, y no hay información sobre la dosis, el momento y la duración más eficaces de tales tratamientos.
Riesgo zoonótico de la enfermedad asociada a Strongyloides westeri en caballos
Ninguno.
Puntos clave
Strongyloides westeri ocurre con frecuencia en potros jóvenes, pero es muy raro que cause enfermedad.
El diagnóstico presuntivo se basa en la presentación clínica y la detección de huevos en las heces.
La ivermectina y el oxibendazol son opciones de tratamiento eficaces.
Se desconoce el efecto de desparasitar a las yeguas en el momento del parto.
Para más información
Recomendaciones de la AAEP para el control de parásitos equinos.
Consulte también la información para propietarios sobre Strongyloides en caballos.
