La comprensión y el cumplimiento por parte del propietario son de vital importancia para que mejoren los problemas de comportamiento de los animales. Dado que la estrategia para modificar el comportamiento indeseable requiere que el propietario esté preparado y sea capaz de identificar cada situación y sustituirla por una respuesta más deseable, el enfoque inicial debe ser evitar o prevenir la situación provocadora. La previsibilidad del problema, la capacidad de los propietarios para implementar las estrategias preventivas iniciales, las expectativas en cuanto a lo que podría lograrse, el temperamento de la mascota, cómo será necesario modificar el comportamiento de la mascota con el tiempo y la viabilidad de implementar el programa considerando el entorno, la familia y la mascota deben revisarse junto con los propietarios y ser aceptables y prácticos para ellos. Además, será necesario prestar especial atención en los casos de agresión para evaluar el riesgo y garantizar la seguridad. (Para pautas sobre la evaluación de factores de riesgo, véase www.esvce.orgwww.esvce.org).