logoVERSIÓN PARA PROFESIONALES

Principios generales de curación de heridas en pequeños animales

PorKevin P. Winkler, DVM, DACVS
Revisado/Modificado jul 2019

La cicatrización de las heridas se produce mediante un proceso similar en la mayoría de los tejidos del cuerpo. Consiste en tres estadios principales: inflamación, proliferación y remodelación.

Inflamación

La inflamación, el primer estadio de cicatrización de las heridas, se puede dividir en varias fases. La hemorragia se controla con vasoconstricción, seguida en cuestión de minutos por vasodilatación Durante la segunda fase, las células se adhieren al endotelio vascular. Para solucionar la infección, los leucocitos migran en 30 minutos a través de la membrana basal vascular a la herida recién creada. Inicialmente, predominan los neutrófilos (como en la sangre periférica); más tarde, los neutrófilos mueren y los monocitos se convierten en el tipo de célula predominante en la herida.

El desbridamiento es la siguiente fase de la inflamación. Aunque los neutrófilos fagocitan las bacterias, son los monocitos, más que los neutrófilos, los que se consideran esenciales para la cicatrización de la herida. Los monocitos secretan una serie de factores de crecimiento necesarios para la cicatrización de las heridas. Adicionalmente, después de la migración fuera de los vasos sanguíneos, los monocitos se consideran macrófagos. Además de la fagocitosis de los restos necróticos, los macrófagos también atraen a las células mesenquimales. Por último, las células mononucleares pueden unirse para formar células gigantes multinucleadas en la inflamación crónica. Los linfocitos también pueden estar presentes en la herida y contribuir a la respuesta inmunitaria contra los restos extraños.

Proliferación

La proliferación es el segundo estadio en la cicatrización de la herida. Esta comprende las fases de proliferación fibroblástica, capilar y epitelial. Durante el estadio de proliferación, las células mesenquimatosas se transforman en fibroblastos, los cuales dejan filamentos de fibrina que actuarán como estructura para la migración celular. En una herida sana, los fibroblastos empiezan a aparecer ~3 días después de la lesión inicial. Estos fibroblastos secretan inicialmente una sustancia fundamental y más tarde colágeno. La secreción temprana de colágeno permite un aumento inicial rápido de la resistencia de la herida, que continúa incrementándose más lentamente a medida que las fibras de colágeno se reorganizan según el estrés de la herida.

La migración capilar proporciona aporte sanguíneo a la herida. El centro de la herida es una zona de baja presión de oxígeno que atrae a los capilares, siguiendo el gradiente de oxígeno. Debido a la necesidad de oxígeno, la actividad fibroblástica depende del grado de desarrollo capilar. Mientras los capilares y los fibroblastos proliferan, se produce tejido de granulación. Dada la extensa invasión capilar, el tejido de granulación tiende a ser a la vez muy friable y resistente a la infección.

La migración de células epiteliales empieza a las pocas horas de producirse la herida inicial. Las células epiteliales basales se aplanan y migran hacia la herida abierta. Es posible que las células epiteliales se deslicen a través del defecto en pequeños grupos o "saltan" unas sobre otras para cubrir el defecto. Las células epiteliales migratorias secretan mediadores, como los factores de crecimiento transformantes alfa y beta, que intensifican el cierre de la herida. Aunque las células epiteliales migran en direcciones aleatorias, la migración se detiene cuando se realiza el contacto con otra célula epitelial en cualquier punto de su superficie (es decir, inhibición por contacto). Las células epiteliales migran a través de la herida abierta y pueden cubrir una incisión quirúrgica cerrada correctamente en 48 horas. Sin embargo, en una herida abierta, las células epiteliales deben tener un lecho sano de tejido de granulación para atravesarlo. La epitelización se retarda en heridas desecadas.

Remodelación

La remodelación es el estadio final de la cicatrización de una herida. Durante este periodo, las fibras de colágeno recién formadas y los fibroblastos se reorganizan a lo largo de las líneas de tensión. Las fibras que presentan una orientación no funcional se sustituyen por fibras funcionales. Este proceso permite continuar incrementando lentamente la resistencia de la herida durante un largo periodo de tiempo (hasta 2 años). La mayoría de heridas permanecen un 15-20 % más débiles que el tejido original. Sin embargo, la vejiga urinaria y el hueso recuperan el 100 % de su resistencia original después de la lesión y la reparación.