La cardiomiopatía se define como una enfermedad primaria del miocardio. La mayoría de las cardiomiopatías en animales se consideran idiopáticas si no son consecuencia de otra enfermedad sistémica o cardiaca primaria. La causa se ha identificado en algunos casos como una mutación genética y en otros como un rasgo hereditario. En animales (sobre todo perros y gatos), las cardiomiopatías se han clasificado como cardiomiopatía dilatada, cardiomiopatía hipertrófica, cardiomiopatía arritmogénica del ventrículo derecho y cardiomiopatía restrictiva. En los gatos, si no se puede identificar una cardiomiopatía específica, la enfermedad se clasifica como cardiomiopatía, fenotipo inespecífico. En los casos en los que se identifica un proceso patológico como la causa de la disfunción miocárdica, es más correcto denominarla como enfermedad miocárdica secundaria o con un término descriptivo precediendo al término "cardiomiopatía" (p. ej., cardiomiopatía dilatada que responde a la taurina o enfermedad cardiaca hipertiroidea).