La hipertermia maligna es un trastorno hipermetabólico del músculo esquelético que se caracteriza por catabolismo y contractura que suele ser secundaria a agentes anestésicos inhalatorios y estrés. Se desarrolla con mayor frecuencia en perros fuertemente musculados. Una regulación anormal del calcio, glucogenólisis, una actividad proteica contráctil dan lugar a producción de calor, CO2 y ácido láctico.
Los signos clínicos incluyen taquicardia, taquipnea, fiebre, rigidez muscular e insuficiencia cardiopulmonar. Los signos se desarrollan 5-30 min después de la exposición al agente anestésico. El tratamiento consiste en la suspensión inmediata de la anestesia e hiperventilación con oxígeno. También se emplean la fluidoterapia IV, corticoesteroides y paquetes de hielo. El dantroleno, un relajante muscular, se puede administrar a razón de 2-5 mg/kg, IV. El pronóstico es malo en los casos graves. Se deben controlar la excreción urinaria, los valores séricos de potasio y la función cardiaca.
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Consulte también la información para propietarios sobre la hipertermia maligna en perros y la hipertermia maligna en gatos.