VERSIÓN PARA PROFESIONALES
Pequeños animales
La enfermedad congénita vestibular se ha descrito en el Cocker Spaniel, el Pastor Alemán, el Doberman Pinscher y en gatos Siameses y Burmeses. Los signos son bilaterales y pueden acompañarse de sordera. Es probablemente un síndrome periférico que afecta al aparato vestibular, y se ha identificado histológicamente una laberintitis en algunos cachorros. El trastorno parece hereditario y se ha identificado una mutación autosómica recesiva en el gen PTPRQ en el Doberman Pinscher. No existe ningún tratamiento. La sordera es permanente, aunque los signos clínicos de disfunción vestibular pueden mejorar a medida que el animal aprende a compensar.