Cuando se investigan trastornos reproductivos en la perra, se debe evaluar primero al macho. Si el macho es un padre probado y la perra está ciclando normalmente, la probabilidad de que dos perros aparentemente normales produzcan una camada después de uno o dos ciclos estrales consecutivos es de hasta el 94 % con un adecuado manejo reproductivo. La causa más común de infertilidad en los perros es una mala planificación.
Antes de un examen de infertilidad, se debe examinar a la perra de cría tanto por su salud general como reproductiva.
Antecedentes en la investigación clínica de los trastornos de la reproducción canina
Independientemente del motivo de la infertilidad, se ha de realizar una anamnesis clínica detallada. Se debe recopilar la anamnesis clínica general, incluyendo la esterilización, las enfermedades previas, las vacunas, la desparasitación, las certificaciones y la dieta. Esta anamnesis médica detallada puede ayudar a revelar los factores que pueden contribuir a la infertilidad o a la idoneidad para la reproducción.
La anamnesis reproductiva de la madre, el padre y los hermanos de camada de la paciente pueden proporcionar pistas sobre los problemas familiares de fertilidad (p. ej., si la madre de la paciente tenía dificultad para parir o era propensa a la distocia).
Se debe recopilar información sobre los ciclos estrales pasados de la paciente (p. ej., la edad en el primer ciclo estral, la fecha y la duración de los ciclos estrales, la duración de los intervalos interestro).
Debe tenerse en cuenta cómo se manejaron los cruces anteriores y cuáles fueron los resultados de esos cruces, si estaban disponibles. Si el cliente también puede proporcionar los resultados del análisis de progesterona y de la citología vaginal de los ciclos estrales previos, podría ser útil evaluar las tendencias que puedan existir. El hecho de que los ciclos estrales previos hayan dado lugar a la gestación y la información sobre el padre utilizado pueden revelar un área de mejora en el manejo reproductivo.
Examen reproductivo en trastornos de la reproducción canina
Después de una exploración física general se realiza un examen reproductivo.
Deben palparse las glándulas mamarias cuidadosamente en busca de masas, asimetría o cualquier otra irregularidad.
Se deben examinar los genitales externos. La inspección visual de la conformación de la vulva y el examen digital de la vagina pueden revelar anomalías como conformación vulvar anormal, estenosis vaginales o un septo medio persistente.
Pruebas diagnósticas en trastornos de la reproducción canina
La vaginoscopia puede ayudar a identificar la anomalía que se percibe en la palpación digital. La visualización de la mucosa vaginal puede indicar en qué etapa del ciclo estral se encuentra actualmente la perra según la cantidad de edema o crenulación (es decir, arrugas de la mucosa vaginal después del edema) o la evidencia de un proceso infeccioso o inflamatorio.
Se puede adquirir un equipo especial (endoscopio) para esta técnica (vagina completa), pero también es eficaz un otoscopio modificado con un cono largo (vagina caudal).
Por cortesía de la Dra. Viviane Gomes, Louisiana State University.
Por cortesía de la Dra. Viviane Gomes, Louisiana State University.
Por cortesía de la Dra. Viviane Gomes, Louisiana State University.
La vaginoscopia es un método útil para controlar el ciclo estral. Los pliegues mucosos longitudinales permanentes (plicas) están presentes en la región caudal de la vagina y cambian según las influencias hormonales. En el proestro, las plicas se vuelven gruesas, redondeadas y húmedas. Durante el inicio del celo, se produce la formación de arrugas (arrugas) de los pliegues vaginales. Al final del estro, los pliegues son afilados, puntiagudos y angulados. A lo largo del diestro y el anestro, los pliegues son bajos y redondeados.
Se deben obtener muestras de improntas vaginales para el cultivo de microorganismos. El uso de un hisopo con doble protección puede ayudar a evitar la contaminación de la muestra. Los resultados del cultivo deben interpretarse a la luz del hecho de que la vagina contiene numerosas bacterias que forman parte de la microbiota normal. El sobrecrecimiento de una especie bacteriana en particular sobre las otras sería un hallazgo anormal.
Utilizando un aplicador con punta de algodón humedecido, se deben tomar muestras de hisopos vaginales de la vagina craneal para la evaluación citológica para identificar la fase del ciclo estral. El hisopo se enrolla luego sobre un portaobjetos en varias hileras no superpuestas, se seca al aire y se tiñe con una tinción variante de Romanowsky. Bajo un microscopio óptico, las células epiteliales son identificables y se clasifican en cuatro grupos principales.
Las células parabasales son pequeñas, redondas y tienen un gran núcleo heterocromático; se describen como una apariencia que recuerda a un huevo frito.
Las células intermedias son más grandes y la proporción entre el citoplasma y el núcleo ha aumentado. Se pueden clasificar en células intermedias grandes y pequeñas.
Las células superficiales tienen núcleos picnóticos con citoplasma de forma angular.
Las células escamosas anucleares se tiñen profundamente basófilas y no tienen núcleo; se describen como una apariencia que recuerda los copos de maíz.
Otras células que se pueden encontrar en la evaluación citológica vaginal son los eritrocitos, los leucocitos, las células de metaestro y las bacterias. Una célula de metaestro es una célula parabasal que tiene uno o más neutrófilos en su citoplasma.
Durante el principio del proestro, los hallazgos de la evaluación citológica vaginal se caracterizan por la presencia de eritrocitos, células parabasales e intermedias pequeñas. A medida que avanza el proestro, las células epiteliales cornificadas (superficiales y anucleares) comienzan a aparecer. Esto puede durar de 2 a 22 días, pero la duración media es de 9 días.
Los hallazgos citológicos vaginales en el celo incluyen >90 % de células epiteliales vaginales cornificadas, con o sin eritrocitos y sin leucocitos. El celo puede variar de 4 a 21 días, pero en promedio dura 9 días.
Los hallazgos citológicos vaginales en el diestro incluyen la entrada de neutrófilos, una disminución de la población de células cornificadas y un aumento de la población de células parabasales. La documentación del diestro puede ayudar a predecir la fecha del parto (57 días después del diestro).
La medida de la concentración de P4 predice cuándo ovulará una perra, pero P4 no es la responsable de la ovulación. A diferencia de la mayoría de las especies, la concentración de P4 aumenta antes de la ovulación en la perra. Por tanto, las pruebas seriadas de concentración de P4 son útiles para predecir el pico de LH, dado que el incremento inicial de la concentración de P4 en suero está estrechamente relacionado con el pico de LH.
Existen kits comerciales de prueba de la concentración de P4, pero tienden a ser semicuantitativos; los analizadores de concentración de P4 pueden ser rentables según su frecuencia de uso. Los laboratorios de referencia ofrecen análisis de la concentración de P4 rentables y oportunos.
Cuando se controla la concentración de P4, las tendencias son más importantes que los resultados de las pruebas individuales. Se recomienda comprobarlo cada 2 días, por lo general excluyendo los fines de semana. Se puede utilizar una curva de concentración-tiempo bien establecida para hacer estimaciones con respecto a la concentración de P4 para los días en los que no se obtuvieron muestras.
Cuando se identifica el pico de LH, se puede predecir la ovulación 2 días después. Dado que puede ser difícil detectar el pico de LH a menos que se mida la concentración de LH diariamente, es preferible la monitorización de la P4.
Una vez documentados el pico de LH y la ovulación, el periodo fértil se identifica como 2-4 días después de la ovulación. Los ovocitos liberados durante la ovulación en la perra se encuentran en la fase de ovocito primario, y el ovocito tarda ~2 días en convertirse en un ovocito secundario fertilizable. El periodo fértil dura de 48 a 72 horas.