La distocia se refiere a partos anormales o con dificultades. Las causas incluyen factores maternos (inercia uterina, tamaño inadecuado del canal del parto) y/o factores fetales (tamaño excesivo del feto, orientación anormal cuando el feto entra el canal del parto). La afección se produce con mayor frecuencia en ciertas razas. En una encuesta (253 partos, 1671 cachorros nacidos), se describió una alta frecuencia de distocia (el 32 % de las perras individuales y el 27,7 % de todos los partos) en Boxers, principalmente debido a la inercia uterina, pero también a presentaciones fetales incorrectas.
La distocia debe considerarse en cualquiera de las siguientes situaciones: 1) animales con historia clínica previa de distocia o de obstrucción del tracto reproductivo, 2) parto que no se produce en el curso de las 24 h siguientes a la disminución de la temperatura rectal <37,7 °C, 3) fuertes contracciones abdominales que duran 1-2 h sin el paso de un cachorro o gatito, 4) parto activo que dura 1-2 h sin que nazca un cachorro o gatito, 5) periodo de descanso durante el parto activo >4-6 h, 6) perra, o gata, con dolor obvio (p. ej., se queja, se lame o se muerde la vulva) o 7) descarga vulvar anómala (p. ej., sangre clara, secreción verde oscura antes de la salida del primer cachorro [indica separación placentaria]).
Se debe determinar la causa de la distocia (si es obstructiva o no obstructiva) y evaluar el estado del animal para establecer el tratamiento adecuado. Es aconsejable tomar una historia clínica completa considerando las fechas del apareamiento, los partos previos, la existencia de algún traumatismo pélvico, etc. Se debe explorar al animal para detectar signos de enfermedad sistémica, que, si están presentes, pueden necesitar una cesárea inmediata. La descarga vaginal normal durante el parto es de color verde oscuro; el color o el carácter anormal requieren atención inmediata. Se debe realizar una exploración vaginal digital estéril para evaluar la permeabilidad del canal del parto y la posición y presentación del feto o fetos. Las radiografías o las ecografías pueden determinar la presencia y el número de fetos, así como su tamaño, posición y viabilidad.
Se puede considerar el tratamiento médico cuando el estado de la madre y los fetos es estable, cuando la posición y la presentación de los fetos son apropiadas y cuando no existe obstrucción. La oxitocina por vía IM (3-20 U en perras, y 2-5 U en gatas) hasta tres veces en intervalos de 30 min, con o sin gluconato de calcio al 10 % (3-5 mL, por vía IV a un ritmo lento), puede estimular las contracciones uterinas. Si no hay respuesta, se debe realizar una cesárea.
La cirugía está indicada en caso de distocia obstructiva, distocia acompañada de shock o de enfermedad sistémica, inercia uterina primaria, trabajo de parto activo prolongado o cuando el tratamiento médico no ha dado resultado.