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Cuestiones de calidad de vida

Revisado/Modificado may 2020

En algún momento de la vida de una mascota, el propietario se enfrentará a esta difícil cuestión. La siguiente información se proporciona como una guía para ayudarlo a tomar las decisiones que tendrá que tomar.

La calidad de vida de su mascota debe ser la primera prioridad durante cualquier programa de tratamiento. Esto es cierto tanto para los propietarios de mascotas como para el personal veterinario. Cuando se trata el cáncer o cualquier otra enfermedad, el objetivo debe ser aumentar la calidad de vida de la mascota. Durante todo el programa de tratamiento, es necesario evaluar la calidad de vida del animal y realizar ajustes para apoyar ese objetivo a medida que se avanza desde el diagnóstico, a través del tratamiento y hasta el final de la vida de la mascota.

Los problemas a corto plazo, como el dolor o la debilidad temporal, a menudo se pueden tratar con medicamentos y cambios en la zona de estar para mejorar la capacidad de la mascota para moverse por la casa. Con el tiempo, sin embargo, puede llegar un momento en el que sea imposible controlar los efectos del cáncer y el animal puede sufrir un gran dolor, ser incapaz de controlar sus funciones orgánicas o no poder comer o responder a otros en su entorno. En este punto, los cuidados paliativos pueden no controlar la angustia del animal y la calidad de vida es deficiente.

Una muerte compasiva y pacífica es la mejor opción en estas situaciones. Al tomar estas decisiones, es muy útil tener un conjunto de pautas o estándares de calidad de vida. Estos criterios pueden ayudar al propietario de una mascota a decidir cuándo prolongar la vida de un animal es peor que proporcionarle un final sereno. Su veterinario y otro personal veterinario le proporcionarán la información que necesita para entender la eutanasia y una evaluación médica del estado de su mascota y las perspectivas de recuperación. En muchos casos, cuando llega el momento de tomar esa decisión, usted y su familia ya se han dado cuenta de que ha llegado el momento de la eutanasia.

Eutanasia

Cuando la vida de un animal se vuelve intolerablemente dolorosa y angustiosa, el acto de poner fin humanitariamente a esa vida se llama eutanasia. La palabra proviene del idioma griego y, literalmente, significa "buena muerte". Los veterinarios están formados para proporcionar una muerte fácil e indolora cuando se ha tomado esa decisión. En muchos casos, decidir sobre la eutanasia es el último acto de bondad y cariño de un propietario.

Hay tres objetivos cuando se administra la eutanasia. El primer objetivo es aliviar el dolor y el sufrimiento. En segundo lugar, es necesario minimizar cualquier dolor, ansiedad, angustia y miedo que pueda tener el animal antes de perder el conocimiento. El tercer objetivo es proporcionar una muerte sin dolor y sin angustia. El método más común de eutanasia es la inyección de una dosis alta de anestésico. Esto permite que un animal se duerma, pierda el conocimiento y muera pacíficamente.

Durante la eutanasia, su veterinario controlará a su mascota, observando el comportamiento del animal y las respuestas corporales para asegurarse de que se estén cumpliendo los objetivos de la eutanasia. Así como los humanos tienen respuestas individuales a los acontecimientos, también las tienen los animales. El control de la eutanasia permite a su veterinario proporcionar el máximo nivel de comodidad tanto para usted como para su mascota.

El proceso de la eutanasia se ha desarrollado para que la pérdida de funciones corporales no cause miedo ni angustia a su mascota. El primer paso es una pérdida rápida del conocimiento, que elimina el miedo y la angustia. A continuación, se pierde la capacidad de moverse. Después, la respiración y el corazón del animal se detienen. Finalmente, se produce una pérdida permanente de la función cerebral. A lo largo de este proceso, el trato compasivo de su mascota es la principal preocupación.

Cada mascota tiene necesidades que se deben reconocer y respetar. Los propietarios de mascotas a menudo tienen sentimientos de culpa por tomar una decisión sobre la eutanasia. Estos sentimientos a menudo se pueden abordar mediante el uso de una escala de calidad de vida. Esta escala también puede proporcionar la ayuda necesaria para tomar decisiones sobre el cuidado de animales con enfermedades incurables distintas del cáncer. Algunos veterinarios han desarrollado sus propias escalas de calidad de vida para su uso en mascotas ( ver La escala HHHHHMM). Las escalas como estas proporcionan un punto de partida para el pensamiento, la discusión y la toma de decisiones. Por supuesto, esta no es la única manera de tomar una decisión sobre la calidad de vida.

Independientemente de la decisión que se tome finalmente, cada animal debe ser considerado como un individuo y recibir un cuidado amable y de apoyo.

La escala HHHHHMM

Una escala de calidad de vida, desarrollada por una veterinaria, se conoce como escala HHHHHMM. Las letras representan Hurt (dolor en inglés), Hunger (apetito en inglés), Hidratación, Higiene, Happiness (felicidad en inglés), Movilidad y "Más buenos días que malos". Algunas de las cuestiones planteadas en esta escala se tratan en el texto. Proporcionan un punto de partida para el pensamiento, la discusión y la toma de decisiones.

HURT (dolor): el control adecuado del dolor, incluyendo la capacidad de respirar, es el aspecto más importante de la calidad de vida y ocupa el primer lugar en la escala. Muchos propietarios de mascotas pueden no darse cuenta de que no poder respirar fácilmente puede ser una de las experiencias más dolorosas para un animal.

HUNGER (apetito): ¿puede su animal comer solo? ¿Ha perdido el interés por la comida? Si su mascota no está recibiendo una nutrición adecuada, con la mano o con alimentación forzada, se debe considerar una sonda de alimentación, especialmente para gatos. La desnutrición se desarrolla rápidamente en los animales enfermos si el cuidador no está bien informado sobre la nutrición de las mascotas.

HIDRATACIÓN: ¿está su animal hidratado? Los fluidos que se inyectan debajo de la piel del animal son un método muy eficaz para suplementar la ingesta de agua de las mascotas enfermas. Puede aprender de su veterinario cómo realizar este procedimiento por su cuenta.

HIGIENE: algunas preguntas que se han de considerar incluyen las siguientes. ¿Se puede mantener a su mascota cepillada y limpia? ¿Está el pelo enmarañado? ¿Está su mascota bien situada para que no tenga que tumbarse en sus propios excrementos después de la eliminación? ¿Puede su mascota controlar su producción de desechos?

HAPPINESS (felicidad): una pregunta importante que se ha de considerar cuando se contempla la eutanasia es si su mascota es capaz de experimentar alguna alegría o estimulación mental. Las mascotas a menudo comunican sus pensamientos y emociones con sus ojos. Debe intentar responder preguntas como las siguientes. ¿Su mascota responde y está dispuesta a interactuar con la familia? Si el animal es un gato, ¿puede ronronear y disfrutar estando en la cama o en su regazo? ¿Hay respuesta a un poco de hierba gatera o a su juguete favorito? ¿Se puede mover la cama de su mascota cerca de las actividades de la familia y no dejarla en un área aislada o descuidada? ¿Está su mascota deprimida, sola, ansiosa, aburrida o asustada?

MOVILIDAD: debe determinar si su mascota puede moverse por sí sola o con ayuda para satisfacer sus necesidades. ¿Su mascota tiene ganas de salir a pasear? ¿Su mascota tiene problemas del sistema nervioso central, como convulsiones o tropiezos? ¿Se puede llevar a su mascota al aire libre o ayudarla a entrar en la caja de arena para hacer sus necesidades? ¿Sería útil un arnés, un cabestrillo o un carro? ¿Está ayudando la medicación?

La necesidad de movilidad parece depender de la especie y la raza. Debe tener en cuenta que los gatos y los perros falderos pequeños pueden y parecen disfrutar de la vida con mucha menos movilidad que los perros grandes y de razas gigantes.

MÁS BUENOS DÍAS QUE MALOS: cuando hay demasiados días malos seguidos o si su mascota parece estar "apagada", la calidad de vida se ve comprometida. Los días malos están llenos de experiencias indeseables como vómitos, náuseas, diarrea, frustración y convulsiones. Los días malos pueden deberse a una debilidad intensa causada por la anemia o al malestar provocado por una obstrucción o un tumor grande e inoperable en el abdomen. Cuando ya no es posible un vínculo humano-animal sano, el cuidador debe ser consciente de que el final está cerca. Tomar la decisión de la eutanasia es un acto de bondad hacia las mascotas que están sufriendo.

Adaptado de Villalobos, A.E., Quality of life scale helps make final call, Veterinary Practice News, Septiembre de 2004.

Decir adiós

Las mascotas son parte de la familia. Cuando mueren, es de esperar y natural que los propietarios y los miembros de la familia estén afligidos y sientan dolor, enfado y estrés. En algunos casos, la pérdida se siente no solo en la familia inmediata del animal, sino también en los vecinos y en el equipo veterinario que ha proporcionado el cuidado. Y, dado que la vida de la mayoría de las mascotas es relativamente corta, esto significa que los propietarios pueden enfrentarse a la pérdida de varias mascotas queridas a lo largo de su vida.

Cuando hay que aplicar la eutanasia a una mascota, la decisión puede generar un abrumador sentimiento de culpa y la idea de que tiene que haber un paso más que podría haberse dado. Incluso con el apoyo de la familia y de su veterinario, la culpa puede no reducirse.

En algunos casos, los propietarios deciden que la eutanasia se realice en casa, no solo para crear una experiencia privada, sino también porque la mascota estará en un entorno familiar y confortable. Otras personas y familias deciden que la eutanasia se realice en una clínica veterinaria, algunas de las cuales ofrecen una "sala de confort" con un entorno que parece más un hogar que una consulta. Algunas personas pueden encontrar el proceso de eutanasia tan molesto que eligen despedirse de su mascota antes del procedimiento, pasando tiempo a solas con el animal.

Durante el procedimiento de eutanasia, algunos propietarios permanecen al lado de su mascota hasta el momento de la muerte. Pueden tomar un trozo de pelo de la mascota como recuerdo, cantar una canción o acariciar el cuerpo del animal. Es perfectamente natural que los propietarios y los miembros de la familia se tomen un tiempo para decir adiós y permanecer junto al animal durante un periodo de tiempo para lograr un cierre. Los veterinarios que tratan el cáncer están familiarizados con estos procesos y tienen experiencia con los propietarios que están pasando por el dolor y el duelo que acompañan a la muerte de una mascota.

En algunas comunidades y en algunas facultades de veterinaria existen servicios de asesoramiento y líneas directas para la pérdida de mascotas. Los propietarios en duelo pueden obtener apoyo a través de estos programas. Así como se necesita tiempo para recuperarse de la pérdida de un miembro humano de la familia, también se necesita tiempo para que las personas se recuperen de la pérdida de una mascota. Algunos propietarios necesitan un año completo para lograr un cierre real y aceptar la pérdida de su mascota.