logoVERSIÓN PARA PROFESIONALES

Introducción a las enfermedades transmitidas entre animales y personas (zoonosis)

PorAnna Rovid Spickler, DVM, PhD
Revisado/Modificado jun 2020

Las enfermedades transmitidas entre los animales y las personas (llamadas enfermedades zoonóticas o zoonosis) presentan un problema de salud pública constante. Muchos microorganismos (como las bacterias y los virus) que infectan a los animales también pueden causar enfermedades en las personas. Estos microorganismos pueden transmitirse de varias formas. El contacto con el propio animal es una forma de transmisión de la enfermedad, pero otras formas incluyen el contacto con la orina, las heces o las secreciones respiratorias de un animal infectado, o el contacto con otros elementos del entorno del animal. La enfermedad también puede transmitirse a través de arañazos o mordeduras de una mascota, o por insectos que transmiten la infección de los animales a los humanos.

Muchas enfermedades zoonóticas conocidas se transmiten de los animales silvestres a las personas, o de los animales silvestres a las mascotas y a las personas. La exposición a los animales que se mantienen como mascotas está aumentando constantemente a medida que el número de mascotas aumenta en los EE. UU. y otros países. Los diferentes tipos de animales que se tienen como mascotas también están aumentando. Las mascotas exóticas, como los perritos de las praderas, se han vuelto populares en muchas partes del mundo. Estos animales han traído enfermedades de la naturaleza a los hogares humanos. Por ejemplo, en 2003 se produjo un brote de viruela del simio (una enfermedad vírica rara) en personas que fueron expuestas al virus por perritos de las praderas recientemente adquiridos. Más tarde se determinó que los perritos de las praderas probablemente estuvieron expuestos al virus cuando entraron en contacto con otra especie exótica, la rata de Gambia, en un distribuidor de mascotas.

Además, la exposición a los animales silvestres está aumentando a medida que los humanos continúan despejando la tierra y construyendo casas en áreas que antes eran el hogar de la vida silvestre. Los animales como los mapaches se han adaptado a las condiciones urbanas y son portadores comunes de la rabia. El deseo de la gente de tocar a los animales silvestres y al ganado ha dado lugar al establecimiento de zoológicos de mascotas. Los funcionarios de salud pública de varios países, como EE. UU., Canadá y Reino Unido, intentan controlar la transmisión de enfermedades en estos zoológicos mediante inspecciones y normas, como el lavado de manos con jabón antibacteriano.

A finales de 2019 se identificó en China un nuevo coronavirus que causa una enfermedad respiratoria grave y otros síntomas en las personas. Aunque todavía se está investigando la fuente animal exacta, es probable que provenga de un murciélago nativo de la zona. La enfermedad que causa se conoce como COVID-19. La diseminación incontrolada de una infección en varios países se conoce como pandemia, que es lo que sucedió cuando la COVID-19 se extendió más allá de la ciudad donde se produjeron los primeros casos para afectar a países de todo el mundo. Aunque un puñado de mascotas ha dado positivo al virus, los animales domésticos no parecen constituir un riesgo de contagio a las personas. Puede encontrar más información sobre el nuevo coronavirus y sus efectos en las personas y los animales en la página de recursos de COVID-19 del Manual Veterinario.

Las personas con el sistema inmunitario debilitado, como los que padecen sida (síndrome de inmunodeficiencia adquirida), son mucho más propensas a contraer enfermedades de los animales, incluyendo la tuberculosis y las infecciones por Salmonella transmitidas por los alimentos. Algunas enfermedades muy raras pueden aparecer en individuos que tienen sida u otras afecciones que afectan a la capacidad del organismo para combatir las infecciones. Muchos de estos microorganismos no suelen causar enfermedades.

Para más información

Consulte también el contenido para veterinarios sobre enfermedades zoonóticas.