Hay varias categorías de pruebas diagnósticas que pueden realizarse para ayudar a su veterinario a determinar la causa de la enfermedad de su mascota.
Bioquímica
La bioquímica clínica es el estudio de la composición química de una muestra. La muestra suele ser la porción líquida de sangre (suero o plasma), aunque también pueden estudiarse otros líquidos corporales. Los análisis químicos clínicos son importantes para determinar el funcionamiento de los diferentes órganos (riñones, hígado, etc.). Pueden ayudar a identificar trastornos específicos, como la diabetes o la pancreatitis. Estas pruebas también se pueden utilizar para controlar la respuesta de su mascota al tratamiento.
Citología
El estudio de las células individuales, su estructura y origen, función o funciones y muerte se conoce como citología. Los especialistas en este campo (patólogos) pueden proporcionar al veterinario información sobre las células del organismo de su mascota. Se recogen muestras de tejido (tomadas mediante una biopsia con aguja fina) o de líquido, luego se preparan portaobjetos y se tiñen para su examen microscópico para determinar los tipos de células presentes. A menudo se recurre a los patólogos para identificar las células cancerosas o determinar si un tumor es benigno o canceroso (maligno). También se puede determinar la presencia de agentes infecciosos. Se pueden identificar algunos microorganismos (algunas formas de levadura tienen un aspecto único), pero las bacterias requieren pruebas microbiológicas para su identificación.
Análisis de líquidos
El análisis de líquidos es el estudio de los líquidos orgánicos distintos de la sangre (orina, líquido articular, etc.). Los especialistas en el análisis de líquidos orgánicos trabajan en estrecha colaboración con otros especialistas para ayudar a proporcionar información sobre la salud de un animal. Por lo general, el análisis de líquidos incluye la verificación de la muestra en busca de células y proteínas. También se pueden realizar pruebas de bioquímica clínica para determinados compuestos.
Hematología
La hematología es el estudio de los elementos celulares de la sangre (glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas) y cómo estos elementos cambian en la salud y la enfermedad. El análisis de sangre más común es un hemograma completo (HC). Esta prueba determina el número y los tipos de células que circulan en el torrente sanguíneo y proporciona información básica sobre la anemia, la inflamación y la coagulación. La determinación del número de glóbulos rojos, su tamaño y forma, y su contenido de hemoglobina (la molécula que transporta el oxígeno) ayuda a identificar trastornos como la anemia. El recuento de los diferentes tipos de glóbulos blancos proporciona información sobre la inflamación, que podría deberse a una infección u otra causa. Las plaquetas también se examinan durante un hemograma completo; los cambios en el número o la apariencia de las plaquetas pueden ayudar a identificar trastornos de la coagulación sanguínea.
Histología
La histología es el estudio de la estructura microscópica (anatomía) de los tejidos animales y vegetales. Los expertos en histología (llamados patólogos) examinan pequeñas muestras de tejido para determinar si son normales o están enfermos. Los patólogos han estudiado las causas y los efectos de las enfermedades y, por lo general, pueden señalar la causa de la disposición anormal de tejidos o células.
A menudo se enviarán pequeñas muestras de tejido a un patólogo si su veterinario sospecha afecciones como el cáncer u otras enfermedades que causan cambios en los tejidos.
Microbiología
La microbiología es el estudio de organismos pequeños como bacterias, virus, hongos y otras formas de vida unicelulares. En un laboratorio veterinario, los especialistas en microbiología pueden realizar muchas pruebas en busca de signos de infección. Un procedimiento común incluye primero el crecimiento (cultivo) y luego la identificación de bacterias, virus y hongos. Las bacterias pueden analizarse para ver qué antibióticos deberían ser eficaces para eliminarlas del organismo. Algunos microorganismos son difíciles de cultivar en el laboratorio, y pueden usarse anticuerpos u otras sustancias químicas para detectar la presencia de microorganismos en una muestra. Las muestras de su mascota, que pueden usarse para cultivar microorganismos, incluyen sangre, orina, heces, secreciones de la nariz o los pulmones e hisopos tomados de una herida o absceso.
Serología
La serología es el estudio del suero sanguíneo y otros líquidos del organismo. La mayoría de las pruebas serológicas determinan el nivel de anticuerpos (denominado título) que están presentes y son reactivos contra un microorganismo infeccioso en particular. Un nivel elevado de anticuerpos, o un aumento en su nivel de una muestra a otra tomada unas semanas más tarde, muestra que un animal ha estado expuesto al microorganismo y que su sistema inmunitario ha producido anticuerpos contra el agente infeccioso. Hay disponibles kits comerciales para una amplia gama de pruebas serológicas. Los kits de pruebas se utilizan regularmente por laboratorios internos y externos para detectar enfermedades como la enfermedad del gusano del corazón (dirofilariosis), la infección por el virus de la leucemia felina, la enfermedad de Lyme, la anemia infecciosa equina y muchas otras.
Toxicología
La toxicología es la rama de la ciencia que estudia los venenos y cómo afectan a los animales. Si su veterinario sospecha que su mascota ha sido envenenada, se recogerán muestras para realizar pruebas toxicológicas a fin de identificar el veneno y la cantidad de daño que puede haber causado. Algunos venenos comunes se pueden identificar rápidamente. La identificación rápida de un veneno puede ser fundamental para la supervivencia de su mascota. En otros casos, las muestras pueden enviarse a un laboratorio externo que puede analizar con precisión una gama mucho más amplia de venenos. Si su mascota ha ingerido algo tóxico, su veterinario puede pedirle que traiga una muestra para su análisis.
Para más información
Consulte también el contenido para veterinarios sobre pruebas médicas veterinarias.