El viaje con una mascota puede ser tan corto como un viaje en coche a la ciudad para una cita veterinaria o tan largo como un traslado permanente a otro país. Independientemente del tipo de viaje, una planificación y una preparación adecuadas ayudarán a evitar sorpresas y harán que el viaje sea menos estresante tanto para usted como para su mascota.
Planificación de viajes en EE. UU.
Incluso viajar dentro de los EE. UU. (especialmente entre estados) será más fácil si lo planifica con anticipación. Recuerde considerar tanto el viaje en sí como el destino final al hacer los planes. En todos los casos, las vacunas de su mascota deben estar actualizadas; en particular, la prueba de la vacunación frente a la rabia puede ser necesaria para viajes interestatales.
Compruebe su transportín o jaula para asegurarse de que está en buenas condiciones, es lo suficientemente grande para su mascota y (si viaja en avión) está aprobado para su uso en un avión. Tenga en cuenta que hay diferencias significativas entre los portaequipajes para uso en la cabina, que tienen lados blandos, y los que se utilizan en la bodega de carga, que son rígidos. Si es posible, deje que su mascota se acostumbre a la jaula mientras usted todavía está en casa alimentando a su animal en la jaula, haciendo que duerma la siesta en la jaula o dejando su manta o juguete favorito dentro.
Asegúrese de que el collar de su mascota tenga placas de identificación que incluyan la información de contacto actual. Si es posible, adjunte una etiqueta con su número de teléfono móvil, el número de teléfono del lugar donde se hospedará o el número de alguien que pueda localizarlo rápidamente. Los collares para gatos deben ser del tipo separable para evitar el estrangulamiento si el animal se engancha accidentalmente.
Tanto las bibliotecas como los listados en línea tienen números de teléfono de clínicas veterinarias situadas a lo largo de las rutas de viaje o en los destinos. La asociación veterinaria estatal apropiada también puede tener listados. Saber dónde llamar para recibir atención veterinaria de urgencia podría salvarle la vida a su mascota.
Transportines para mascotas
Si su viaje es parte de una reubicación, su compañía de mudanzas puede proporcionarle consejos útiles para el transporte de su mascota y suministros (como una pecera). Hable con su veterinario sobre cómo ayudar a su mascota a adaptarse a su nuevo hogar.
Planificación de viajes internacionales
Los EE. UU. se han convertido en una nación de viajeros internacionales, y el hecho de llevar animales de compañía en viajes al extranjero sin duda ha aumentado durante las últimas décadas.
Si está considerando llevar a su mascota de viaje fuera de EE. UU., debe consultar primero a su veterinario. El mejor consejo que puede dar cualquier veterinario es simplemente evitar, si es posible, viajar al extranjero con su mascota. Incluso con una planificación cuidadosa, viajar con una mascota puede ser difícil. Una mascota que viaja al extranjero puede separarse de sus propietarios o enfrentarse a un largo periodo de cuarentena. Peor aún, la mascota puede adquirir una enfermedad desconocida o un parásito. El peligro de que estos "inquilinos no invitados" regresen a EE. UU. o a otro país de origen es una preocupación constante. Por esta razón, la mayoría de los países han desarrollado restricciones complejas para la introducción (o reintroducción) de animales, productos animales y artículos contaminados para evitar la entrada de infecciones exóticas.
Algunos datos muestran que durante los viajes internacionales, los viajeros procedentes de EE. UU. pasaron una media de 18 noches fuera del país. Para viajes cortos como estos, la duración del viaje al extranjero es mucho más corta que la duración del periodo de cuarentena de las mascotas que a menudo exigen los países extranjeros. Por lo tanto, tiene sentido que, en los viajes cortos, las mascotas se queden en casa. La situación es muy diferente para los ciudadanos que residen temporalmente fuera del país (p. ej., personal militar, personal consular, misioneros o expatriados). Estos ciudadanos a veces viven fuera de EE. UU. durante meses o años, y a menudo poseen perros o gatos que fueron adquiridos en EE. UU. y transportados a ese país extranjero o adquiridos en el país extranjero.
Si decide viajar internacionalmente con su mascota, debe ponerse en contacto con la embajada o el consulado de la(s) nación(es) a la que viajará para asegurarse de que se han cumplido todos los requisitos de importación necesarios y que los requisitos de cuarentena (si los hay) se entienden claramente. Esto debe hacerse al menos 9 meses antes del viaje. Las embajadas suelen estar ubicadas en grandes áreas metropolitanas, como Nueva York, Los Ángeles o Washington, DC. El Departament of State de EE. UU. mantiene una lista de embajadas extranjeras y consulados.
Cuando esté planificando los detalles de su viaje, asegúrese de que los aeropuertos que piensa utilizar puedan proporcionar los servicios necesarios de aduana y/o cuarentena que pueda necesitar. Si su mascota necesita una cuarentena, averigüe si es necesaria una reserva y cuál será el coste.
Además de la normativa que se describe a continuación, querrá saber dónde encontrar ayuda veterinaria si es necesaria. Si es posible, investigue con anticipación (o pregunte a un amigo o colega en el país de destino) para encontrar la información de contacto de los veterinarios locales o de una asociación veterinaria que pueda proporcionar referencias. Si no habla el idioma del país al que está viajando, busque veterinarios que hablen inglés u otro idioma que comprenda. Los libros de frases a menudo tienen secciones para urgencias médicas humanas y pueden ser útiles si necesita explicar la enfermedad de su animal a un veterinario que hable un idioma diferente.
