La hemiplejia laríngea recurrente izquierda se caracteriza por paresia o parálisis permanente del cartílago aritenoide izquierdo y el pliegue vocal. Se manifiesta clínicamente como intolerancia al ejercicio y ruido inspiratorio de las vías respiratorias ("rugido") durante el ejercicio. La hemiplejia del lado derecho y la disfunción aritenoide bilateral (paraplejia) son poco frecuentes.
Etiología y patogenia:
Ilustración del Dr. Gheorghe Constantinescu. Dibujado, con autorización, de una diapositiva cortesía del Dr. D. A. Wilson, Facultad de Medicina Veterinaria, Universidad de Misuri.
La pérdida progresiva de las fibras mielinizadas grandes en la porción distal de los nervios laríngeos recurrentes produce atrofia neurogénica de la musculatura laríngea intrínseca, cuyo músculo crucial es el músculo cricoaritenoideo dorsal. La distrofia axonal del nervio recurrente izquierdo se produce con más frecuencia que la del derecho, tal vez debido a su extensa longitud que rodea la base del corazón. La hemiplejia laríngea izquierda es probablemente hereditaria. Las causas menos comunes incluyen traumatismo directo del nervio laríngeo recurrente, inyección perivascular accidental de sustancias irritantes e intoxicaciones por plantas (p. ej., Cicer arietinum [garbanzos] y Lathyrus spp) y por intoxicaciones por agentes químicos. La intoxicación por plomo debe sospecharse en caballos con parálisis laríngea bilateral. El nervio peroneo (con una longitud similar al nervio laríngeo izquierdo) pueden estar afectado por daños tóxicos y distrofia axonal del nervio peroneo que puede manifestarse como flexión repentina de una o ambas patas traseras ( ver Arpeo). Aunque todas las razas están afectadas, hay una mayor prevalencia en los machos y en las razas grandes de cuello largo. La prevalencia en los caballos Pura Sangre Inglés jóvenes puestos a la venta se estima en ~3-5 %.
La pérdida de control neuromuscular del músculo abductor causa colapso del cartílago aritenoide y del pliegue vocal, lo que reduce el área de la sección entrecruzada glótica. La resistencia al flujo aéreo necesita un mayor esfuerzo respiratorio. Debido a la naturaleza flexible de la glotis, la presión subatmosférica exagerada en la vía aérea causa un colapso aún mayor del cartílago aritenoide y exacerbación de la impedancia al flujo de aire. Después de inspirar durante un ejercicio vigoroso, el lado afectado obtura la línea medial (por presión negativa en la vía aérea) hasta que toca al aritenoide normal en abducción, obstruyendo eficazmente el paso de aire (colapso dinámico). Se produce entonces el silbido inspiratorio característico debido a la resonancia dentro del ventrículo abierto en el lado afectado. El estridor más duro, o rugido, es producido por el vórtice que sale de los bordes del cartílago aritenoide y del pliegue vocal.
Hallazgos clínicos y diagnóstico:
Cortesía del Dr. Bonnie R. Rush.
Los signos clínicos principales son los ruidos inspiratorios anómalos durante el ejercicio y la intolerancia a este. Los caballos afectados son asintomáticos en reposo pero pueden tener un relincho inusual. El diagnóstico se confirma mediante la observación endoscópica de la movilidad reducida o ausente del cartílago aritenoide y el pliegue vocal. Con la hemiplejia de la laringe, el cartílago aritenoide y el pliegue vocal se sitúan en una posición mediana dentro de la luz de la laringe y están inmóviles. Los movimientos asincrónicos de los cartílagos laríngeos se producen a menudo, con relevancia clínica variable. En los caballos con asincronía laríngea, intolerancia al ejercicio y sonidos respiratorios durante el ejercicio, se debe realizar una exploración endoscópica de la función laríngea durante el ejercicio en cinta continua, para confirmar el trastorno laríngeo.
Los diagnósticos diferenciales incluyen otras afecciones faríngeas que causan obstrucción de las vías respiratorias superiores e intolerancia al ejercicio. La mayoría de estas afecciones se diferencian fácilmente de la hemiplejia laríngea durante el examen endoscópico. Aunque la condropatía aritenoide puede confundirse con la hemiplejia de la laringe, se puede evitar un diagnóstico erróneo observando la forma y el tamaño de los cartílagos aritenoides. En la condropatía aritenoide, los aritenoides se ensanchan transversalmente y pierden su forma característica de "haba". La abducción y la aducción suelen estar limitadas. El axial (medial) del cartílago aritenoide puede perder la forma por el tejido de granulación que sobresale a través de la mucosa y puede estar presente una lesión de contacto (en beso) sobre el cartílago aritenoide opuesto. La condritis aritenoide siempre debe considerarse cuando se da una reducción de la motilidad del aritenoide derecho. La exploración radiográfica de la faringe puede revelar mineralización dentro de los cartílagos aritenoides en los casos de condritis.
Tratamiento:
La laringoplastia protésica puede estabilizar el lado afectado de la laringe durante la inspiración y evitar el colapso dinámico de las vías respiratorias durante el ejercicio. La ventriculectomía laríngea realizada mediante laringotomía, o ventriculocordectomía a través de láser transendoscópico, mejorar el flujo aéreo y reduce el "rugido" durante el ejercicio. La laringoplastia protésica se suele realizar en los caballos de carrera y es la única técnica que reduce satisfactoriamente la impedancia al flujo inspiratorio. Las complicaciones posoperatorias incluyen tos crónica, aspiración crónica de alimentos, fallo del implante e infección del implante. El rendimiento atlético mejorará después de la cirugía; sin embargo, los caballos son más propensos a experimentar enfermedad inflamatoria de las vías respiratorias y hemorragia pulmonar inducida por el ejercicio, tienen menos carreras y es improbable que desarrollen su potencial de rendimiento previsto.