Alimentación de las terneras de razas lecheras desde el destete hasta la madurez

La alimentación de la novilla de reposición desde el destete hasta el primer parto debe ser sistemática, con objetivos definidos. Un abordaje de crecimiento dirigido se basa en la definición de la edad deseada al primer parto, por lo general entre los 22 y 24 meses de edad, y en el conocimiento del tamaño adulto de las vacas en la explotación. Con estos dos valores, se puede determinar la tasa de ganancia necesaria desde el destete hasta la cubrición para alcanzar el 50-55 % del peso adulto a los 13-15 meses de edad, basándose en la edad deseada en el primer parto. Desde la cría hasta el primer parto, se puede determinar una tasa de ganancia deseada para lograr un peso corporal posparto de >85 % del peso adulto.

Después del destete, los terneros todavía no son rumiantes completamente funcionales con la capacidad de fermentar forraje de baja calidad lo suficiente como para alcanzar las necesidades. Los terneros destetados deben recibir el mismo grano de inicio antes del destete para minimizar el ajuste digestivo o la reducción de la ingesta debido a la novedad alimentaria. Se debe proporcionar grano hasta una ingestión de materia seca de 2,5-3 kg/día; a partir de entonces, se debe proporcionar forraje adicional de alta calidad. Las necesidades de energía para un crecimiento adecuado en terneras de 3-15 meses de edad pueden satisfacerse en gran medida con el consumo de forraje de buena calidad. Satisfacer las necesidades de proteína durante este periodo es un reto, porque las necesidades de proteína son altas en relación con las necesidades de energía. El uso de ensilado de maíz sin restringir la ingesta de energía dará lugar a una mayor acumulación de grasa, pero no a un crecimiento óptimo del cuerpo. Las novillas de reposición que no han alcanzado la edad reproductiva necesitan más proteína para soportar la ganancia de peso corporal magro.

Para raciones de ejemplo para novillas lecheras de razas grandes de 3-15 meses de edad, See table Características de raciones de ejemplo para novillas de reposición en crecimiento. Las concentraciones de proteína bruta de estas raciones de ejemplo son altas, porque hay un exceso de PDR, muy probablemente debido a una subestimación del potencial de PNDR en animales más jóvenes como resultado de una velocidad de paso más rápida. Las raciones más típicas para las novillas antes de la cubrición contienen al menos un 15 % de proteína bruta y hasta un 18 %. La alimentación con una ración totalmente mezclada es un enfoque razonable para alimentar a los terneros destetados, aunque también se pueden utilizar dietas de grano y heno.

Después de la cubrición, las necesidades de proteína (13-14 %) y energía durante la gestación pueden satisfacerse con forrajes de buena calidad. En general, la alimentación con ensilado de maíz durante este periodo debe limitarse a no más de la mitad de la materia seca de la dieta, preferiblemente menos. Esto es para prevenir el sobrepeso, que aumenta el riesgo de enfermedad en el parto. Hay muchas opciones para los ingredientes de los alimentos en estas raciones, siempre que la ingesta de nutrientes satisfaga las necesidades para la tasa de ganancia deseada. Dado que la alimentación es el coste más caro de criar una novilla, se debe considerar el uso de ingredientes de bajo coste y la eficiencia de la alimentación. Dos abordajes para alimentar a las novillas son proporcionar una ingesta ad libitum de una ración de menor calidad o una alimentación de precisión con una ración de mayor calidad. La alimentación de precisión implica una ingesta limitada para satisfacer las necesidades. Una ingesta menor da lugar a una velocidad de expulsión más lenta y una mayor digestibilidad del alimento. La reducción de la ingesta de alimento y una mayor digestibilidad dan lugar a menos restos fecales que manejar.

Las velocidades de crecimiento insuficientes dan como resultado bien una edad mayor al primer parto, lo que aumenta el costo de la cría de las novillas, o bien madres más pequeñas al primer parto, lo que limita la producción de leche y las tasas de concepción durante la primera lactación. Por el contrario, las velocidades de crecimiento excesivas, especialmente las asociadas principalmente con el engorde, pueden afectar negativamente a la producción de leche subsiguiente, así como aumentar el riesgo de problemas metabólicos en el parto. Las tasas de crecimiento objetivo entre el destete y el parto variarán según el peso maduro y la edad en el primer parto. La ganancia diaria normal oscilará entre 500 g/día para razas más pequeñas y 800 g/día para razas más grandes. El peso y la altura deben medirse con frecuencia para evaluar si el programa de alimentación está logrando las tasas de crecimiento deseadas y el desarrollo de la estructura. La respuesta de crecimiento de las novillas a raciones aparentemente similares varía mucho entre granjas, por lo que el control de la velocidad de crecimiento es particularmente importante. Para objetivos de peso corporal en un rango de incrementos de edad para novillas de varios tamaños corporales maduros, See table Objetivos de peso corporal recomendados (kg) para novillas de diferentes edades.

Además de la ración, el entorno de la novilla de reposición puede afectar mucho al rendimiento y los resultados. Las diferentes necesidades nutricionales de las terneras de distintas edades dictan que se mantengan en corrales separados según su edad y tamaño. Los terneros entre el destete y los 5 meses de edad deben mantenerse en grupos de 6 o menos. Las terneras de más edad pueden mantenerse en grupos más grandes; sin embargo, el tamaño de los animales debe ser uniforme. Se debe proporcionar suficiente espacio en las camas y en el área de descanso para cada animal dentro del grupo para asegurar la comodidad adecuada de la novilla y minimizar el estrés.