La mayoría de los trastornos del metabolismo del magnesio se deben a problemas asociados con la absorción del mineral desde el tracto digestivo. Las diferencias anatómicas en el tracto digestivo entre especies están asociadas con la importancia de los trastornos del magnesio que se dan en una especie en particular. Los trastornos del metabolismo del magnesio son menos frecuentes en los perros que en los bovinos y ovinos. Demasiado magnesio en la sangre (hipermagnesemia) es raro, pero se ha descrito en perros después de la ingestión de hielo derretido y en animales con insuficiencia renal que estaban recibiendo fluidos intravenosos. Puede producirse una parada cardiaca con niveles de magnesio en sangre muy elevados. Muy poco magnesio en la sangre (hipomagnesemia) es común en perros críticamente enfermos. Aunque no suele causar ningún signo, la hipomagnesemia puede empeorar otras afecciones y producir niveles sanguíneos bajos de otros electrolitos importantes, como el potasio y el calcio.
Consulte también el contenido para veterinarios sobre trastornos del metabolismo del magnesio.
