La faringitis es una inflamación de las paredes de la garganta (faringe). Acompaña a la mayoría de las infecciones víricas y bacterianas de las vías respiratorias superiores, como el moquillo en los perros. Otras causas incluyen daño de la faringe por un cuerpo extraño o cáncer de boca o amígdalas. En los perros, los cuerpos extraños atascados en la boca y la garganta son bastante comunes; los objetos típicos incluyen alfileres, agujas, púas de puercoespín y trozos de palo o fragmentos de hueso.
En general, los animales con faringitis tienen un deseo normal de comer y beber, pero pueden tener dificultad al tragar. Como resultado de la inflamación y los abscesos, se puede desarrollar una situación de urgencia si la vía aérea se obstruye. El diagnóstico se basa en una exploración física completa, que puede incluir radiografías y un examen endoscópico de la garganta, junto con cultivos de líquidos y lugares que drenan.
El tratamiento primario consiste en identificar y controlar o eliminar los factores que provocan la enfermedad. Si la faringitis ha sido causada por un cuerpo extraño, la cirugía para extraer el objeto y cualquier tejido muerto se realiza bajo anestesia general. Los antibióticos pueden ser necesarios si la faringitis está causada por una infección. Los tratamientos antiinflamatorios también se usan a menudo. Si hay un absceso, puede ser necesario drenarlo y lavarlo.
Consulte también el contenido para veterinarios sobre la faringitis.