La mayoría de los veterinarios contribuyen, directa o indirectamente a los objetivos y resultados de la salud pública. Las contribuciones a la salud pública veterinaria pueden clasificarse en seis áreas principales.
Papel de los veterinarios en las enfermedades zoonóticas
La mayoría de los veterinarios privados contribuyen a la salud pública durante la práctica rutinaria. Tanto los profesionales de grandes como de pequeños animales se convierten en expertos en el diagnóstico de enfermedades agudas y crónicas de los animales, que pueden afectar a los propietarios, a sus familias y a las comunidades circundantes. Ejemplos específicos de actividades de salud pública incluyen la realización de exámenes rutinarios de salud, el mantenimiento de los regímenes de vacunación, la puesta en marcha de programas de control de parásitos, el asesoramiento sobre los riesgos del contacto con animales para individuos inmunodeprimidos, la facilitación del uso de perros guía y de servicio para personas con discapacidad y la promoción de los beneficios del vínculo humano-animal (p. ej., para los discapacitados y los ancianos, así como para los veteranos de guerra y otras personas que padecen trastornos de estrés postraumático).
Las comunidades están mejor atendidas cuando los veterinarios abordan los problemas de salud colectiva con una perspectiva de salud de la población, aplicando principios epidemiológicos relevantes a nivel de la comunidad o de la población. Además de estos servicios directos, los veterinarios informan sobre los acontecimientos y las tendencias de la enfermedad a las agencias reguladoras y de salud pública, colaboran con médicos en la prevención y control de las enfermedades zoonóticas y asesoran a las juntas y comisiones locales de salud. Estas relaciones no existirían de no ser por el vínculo inextricable entre la salud animal y humana.
Muchos factores contribuyen al incremento de la vulnerabilidad del ganado frente a las enfermedades infecciosas. Entre ellas figuran el aumento de la intensidad y la concentración de la agricultura de producción, la convergencia genética de muchas especies productoras de alimentos, la accesibilidad del ganado al contacto externo (a pesar de las rigurosas medidas de bioseguridad), la escala y la frecuencia del transporte de animales (nacionales e internacionales), el aumento del tamaño de las parcelas de alimentación, la falta de inmunidad a las enfermedades foráneas de los animales, la naturaleza relativamente porosa de las fronteras nacionales y la escasez significativa de especialistas en diagnóstico de enfermedades foráneas de los animales y epidemiólogos. Muchas enfermedades zoonóticas importantes transmitidas por animales de abasto (p. ej., brucelosis y tuberculosis) se han erradicado o controlado en América del Norte y Europa mediante la pasteurización de los productos lácteos, las pruebas y el sacrificio del rebaño y las inspecciones en el matadero. Otras enfermedades transmitidas a humanos por animales de abasto (p. ej., campilobacteriosis, listeriosis, salmonelosis, estafilococosis y enfermedad por E coliproductora de toxina Shiga) causan una fracción considerable de la carga nacional e internacional de morbilidad alimentaria y muertes.
Papel de los veterinarios en la seguridad alimentaria
Los veterinarios que trabajan con animales destinados a la alimentación y al servicio de la Administración contribuyen de forma significativa a la seguridad del sector alimentario. Las funciones en la producción animal de abasto pueden clasificarse según la fase de producción. Las actividades ante mortem incluyen la seguridad del bienestar animal, el reconocimiento y la prevención de enfermedades zoonóticas, la inspección de los animales antes del sacrificio y las pruebas de residuos de antibióticos. Las actividades post mortem incluyen la inspección de canales y la determinación de residuos en tejidos.
Los veterinarios clínicos de animales de abasto también contribuyen en general a la salud pública a través de programas de sanidad de explotaciones, que incluyen el tratamiento y la prevención de enfermedades; el cuidado, manejo y asesoramiento ambiental; la eficiencia reproductiva; las pautas de vacunación; la nutrición; la reducción del estrés; los protocolos de materias primas (p. ej., el programa nacional de garantía de la calidad de la carne); y planes de bioseguridad y biocontención. Además de controlar la salud de los animales, otras actividades importantes son el uso apropiado y adecuado de los antimicrobianos, la vigilancia de las enfermedades, la investigación y mitigación de los brotes, la vacunación contra patógenos específicos de alta incidencia o prevalencia (p. ej., E coli O157:H7 y Salmonella), la colaboración con otros profesionales de la salud (Una Sola Salud), la inspección de instalaciones alimentarias (p. ej., producción, venta al por menor y almacenamiento), los exámenes de importación/exportación, el liderazgo del departamento de salud, la notificación de salud pública (riesgo), el suministro de alimentos después de los casos de crisis y la investigación de procesos de producción de alimentos más seguros.
Papel de los veterinarios en los aspectos sanitarios de la medicina de animales de laboratorio y los laboratorios de diagnóstico
Las complicaciones a la hora de reconocer el resurgimiento de enfermedades infecciosas y de desarrollar nuevos tratamientos han puesto un énfasis sin precedentes en el manejo y mantenimiento de colonias e instalaciones de animales de laboratorio para la investigación y el diagnóstico. Se está haciendo cada vez más hincapié en la colaboración internacional y en los centros de referencia, muchos de los cuales se centran en las enfermedades zoonóticas y la medicina comparativa. Dado que la mayoría de los brotes de enfermedades zoonóticas se producen en regiones tropicales desprovistas de vigilancia local y capacidad de diagnóstico y respuesta, el papel de estos centros de colaboración y referencia internacionales probablemente se expandirá, lo que requerirá un mayor número de personal veterinario formado y experimentado. Se necesitan profesionales formados en medicina de animales de laboratorio para mantener la salud de los animales de laboratorio y asegurar su uso humanitario para la investigación y el diagnóstico. [Enlace a la sección de Medicina de animales de laboratorio] Para más información sobre el manejo de los aspectos de salud de la medicina de animales de laboratorio y los laboratorios de diagnóstico:
Association for Assessment and Accreditation of Laboratory Animal Care International (AAALAC International)
Guide for the Care and Use of Laboratory Animals, Eighth Edition (2011)
Papel de los veterinarios en la investigación biomédica
Los humanos interactúan con los animales de muchas maneras todos los días, desde compartir una compañía cariñosa con las mascotas, hasta jugar y competir juntos en deportes, y manejar rebaños y lotes que proporcionan alimento. La salud y el bienestar de los animales en nuestras vidas están notablemente relacionados con los de los humanos de varias maneras. Muchas enfermedades y procesos patológicos que se producen naturalmente en los animales son idénticos a las de los humanos (p. ej., osteoartritis, diabetes y muchos cánceres). La investigación biomédica básica de estos problemas proporciona soluciones que pueden beneficiar tanto a los animales como a los humanos. Los animales se han beneficiado de muchos avances terapéuticos adoptados de la medicina humana. Por el contrario, los ensayos clínicos veterinarios pueden aportar información sobre tratamientos prometedores para su uso en humanos. Consulte la página web de investigación biomédica de la American Veterinary Medical Association (AVMA).
Basándose en la información de la vigilancia de la salud pública, las instituciones de investigación deben comprender mejor las interacciones entre los hospedadores, los parásitos, los vectores, los patógenos y el medio ambiente. El establecimiento de un vínculo causal entre la enfermedad humana y animal se basa en tales esfuerzos de investigación, a menudo a través de alguna combinación de estudios moleculares, teoría matemática y epidemiología experimental, utilizando la investigación de campo o de laboratorio. Como ha destacado la OMS, la investigación de las zoonosis endémicas y reemergentes a menudo se ve obstaculizada por la falta de conocimientos básicos sobre las interacciones entre el hospedador y el patógeno. Para muchas especies zoonóticas, incluso la vía de transmisión a las personas sigue siendo desconocida. En algunos casos, la biología molecular de los agentes en hospedadores humanos y animales puede ser muy diferente. Por ejemplo, hay importantes trabajos de investigación dirigidos a la identificación de factores de virulencia para E coli O157:H7 y las razones de sus expresiones diferenciales en personas y ganado. Véase National Association for Biomedical Research.
Papel de los veterinarios en la formación y la formación continua sanitaria
La formación de nuevos veterinarios y la difusión de nuevas capacidades a los que ya están en la práctica recae en gran medida en las instituciones académicas del país (especialmente en las que ceden terrenos). A nivel universitario, esto implicará cada vez más relaciones multidisciplinarias entre las facultades de medicina, medicina veterinaria, sociología y ciencias básicas.
La mayoría de los epidemiólogos trabajan para organismos gubernamentales o industriales, pero prácticamente todos los veterinarios contribuyen a educar al público sobre la amenaza de enfermedades infecciosas y no infecciosas. Los veterinarios tienen la responsabilidad de mantenerse informados sobre las amenazas de enfermedades y las fuentes verosímiles de ese conocimiento para sus comunidades. Para que el público tenga un conocimiento y una conciencia adecuados, se requiere una combinación de percepción y conciencia del riesgo, especialmente porque las partes interesadas de la comunidad desempeñan un papel importante en la resolución del riesgo.
Ver American Association of Extension Veterinarians y Association of American Veterinary Medical Colleges.
Papel de los veterinarios en la producción y control de productos biológicos, dispositivos médicos y productos farmacéuticos
Garantizar que los fármacos, las vacunas y los dispositivos para animales sean seguros y eficaces es una responsabilidad compartida entre los veterinarios en la FDA, el USDA y la EPA. En general, la FDA, específicamente el Center for Veterinary Medicine, regula los fármacos para animales, los alimentos para animales y los dispositivos veterinarios, mientras que el USDA regula las vacunas y los productos biológicos para animales. Específicamente para los pesticidas, la FDA regula ciertos productos de pulgas y garrapatas para animales, mientras que la EPA regula otros. Dentro de cada una de estas agencias gubernamentales, los veterinarios sirven para fomentar el desarrollo de nuevos productos y, al mismo tiempo, protegen a los consumidores de esos productos de afirmaciones falsas o engañosas. Ver la página web Federal Veterinarians at Work de la FDA.
Otra función importante de los agentes biológicos es la regulación de su almacenamiento, uso y transferencia. Debido a la virulencia y transmisibilidad inherentes, el acceso a muchos patógenos de enfermedades, denominados agentes selectos, se ha limitado cada vez más a instalaciones legítimas para usos legítimos. El Federal Select Agent Program está administrado conjuntamente por los CDC y el Animal and Plant Health Inspection Service (APHIS) del USDA. Este programa supervisa la posesión, el uso y la transferencia de ciertos agentes biológicos y toxinas que tienen el potencial de representar una amenaza grave para el público, para la salud animal o vegetal o para los productos animales o vegetales.
Papel de los veterinarios en la actividad gubernamental y legislativa
Los veterinarios están empleados en varios niveles del Gobierno estatal y federal. Más de 3000 veterinarios están trabajando a nivel federal, de los cuales, casi dos tercios, están en el USDA. Otras agencias federales que emplean a un gran número de veterinarios son el Department of Defense (DoD) y el Department of Health and Human Services (DHHS; p. ej., en los CDC, la FDA y los National Institutes of Health [NIH]). Los programas de salud pública comprenden la mayoría de estas oportunidades de empleo, siendo el cuidado animal una fracción menor. Los ejemplos incluyen la supervisión de los programas de inspección de seguridad alimentaria, la vigilancia de enfermedades y la investigación de brotes, el cuidado de los animales de laboratorio, la investigación biomédica y la gestión, y el liderazgo de los programas de salud pública.
A nivel estatal, cada departamento de agricultura suele tener un veterinario estatal que se encarga de proteger directamente las industrias ganadera, avícola y acuícola, e indirectamente al público, mediante la prevención, la detección temprana, la contención y la erradicación de enfermedades del ganado, las aves de producción y los peces de importancia económica que, en muchos casos, son transmisibles a las personas. El veterinario estatal regula la importación, el transporte y el procesamiento de los animales y es responsable del control y de la erradicación de las enfermedades de las aves de producción y del ganado, la regulación de la piscicultura y los programas de respuesta a emergencias. Se controla el bienestar de los animales de granja y, cuando es necesario, la Office of the State Veterinarian lleva a cabo las investigaciones y los enjuiciamientos relacionados con casos de crueldad animal.
La mayoría de los estados y territorios emplean veterinarios en sus departamentos sanitarios como veterinarios de salud pública, que suelen trabajar en el control y la prevención de enfermedades zoonóticas. Sin embargo, están cada vez más involucrados en los esfuerzos de Una Sola Salud. Los veterinarios de salud pública suelen trabajar en epidemiología de enfermedades transmisibles, toxicología o programas de salud ambiental dentro de los departamentos de salud estatales, regionales o locales. Para obtener más información, consulte National Association of State Public Health Veterinarians.
Una última categoría de actividad gubernamental es la legislativa. Un número relativamente reducido de veterinarios presta servicios en varios niveles para promulgar leyes, reglas y regulaciones que sirven para proteger la salud pública, la preparación doméstica y la defensa nacional. Los veterinarios son miembros de la Cámara de Representantes de EE. UU., ocupan puestos de liderazgo en varios departamentos de EE. UU. (como el USDA, el DHHS, el DoD y el Department of Homeland Security [DHS]) y actúan como enlaces legislativos para asociaciones profesionales como la AVMA. Su trabajo a nivel legislativo cuenta con la ayuda de la acción comunicativa de los veterinarios en ejercicio de todo el país, que transmiten ideas y problemas a los legisladores para mejorar los resultados legales y políticos. Para obtener más información, consulte lo siguiente:
EPA Science Inventory: Veterinarians in Environmental Health: Opportunities for Veterinarians at the Environmental Protection Agency
USDA-FSIS: Public Health Veterinarian (PHV)
USDA-APHIS: National Veterinary Accreditation Program
US Public Health Service (USPHS): Veterinarian
National Institute for Occupational Safety and Health (NIOSH): Veterinary Safety and Health