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Lesiones eosinofílicas en perros

PorKaren A. Moriello, DVM, DACVD
Última revisión/modificación abr 2020

En los perros se han documentado lesiones caracterizadas histológicamente como granulomas eosinofílicos. Estas lesiones son raras, pero se han observado en la cavidad oral como masas ulceradas o vegetativas o como placas o nódulos elevados. Estos se asocian más comúnmente con reacciones de hipersensibilidad. Cualquier raza puede verse afectada, pero el Husky Siberiano y el Cavalier King Charles Spaniel pueden presentar mayor riesgo.

Algunas lesiones se resuelven sin tratamiento. Puede ser necesaria la administración de prednisona o prednisolona PO (0,5-1 mg/kg/día, hasta la remisión de la lesión y luego disminuir gradualmente la dosis durante varias semanas). La recidiva de las lesiones puede indicar un desencadenante alérgico subyacente.

La forunculosis eosinofílica nasal canina puede darse en cualquier perro y a cualquier edad. Las lesiones se observan más a menudo en verano y pueden estar asociadas a las picaduras de insectos. El inicio de las lesiones es rápido y se produce una inflamación aguda, proliferativa y exudativa y dolor en la nariz/hocico. En algunos perros pueden observarse lesiones similares en la cabeza, en la región periocular y alrededor del pabellón auricular. Los frotis de impresión muestran eosinófilos. El diagnóstico se basa en los signos clínicos y la citología. Si hay sobrecrecimiento microbiano, puede ser necesaria la terapia tópica con antibióticos.

Para más información

Consulte también la información para propietarios sobre enfermedades eosinofílicas en perros.