Sarna sarcóptica en caballos
Sarcoptes scabieiequi, que causa la sarna sarcóptica, es infrecuente, pero es el tipo más grave de sarna en los caballos. El primer signo de infestación es un prurito intenso debido a la hipersensibilidad que se desarrolla a los productos generados por los ácaros. Las primeras lesiones aparecen en la cabeza, el cuello y los hombros. Las regiones protegidas por pelo largo y las partes distales de las extremidades por lo general no se ven afectadas.
Las lesiones comienzan como pequeñas pápulas y vesículas, que luego se convierten en costras. La alopecia y las costras se extienden y la piel se liquenifica formando pliegues. Si las infestaciones no se tratan, las lesiones pueden extenderse a todo el cuerpo y causar pérdida de peso, debilidad general y anorexia. Los raspados de piel negativos no excluyen la enfermedad; la biopsia puede establecer un diagnóstico.
El rociado o baño con sulfuro de cal está indicado para su uso contra ácaros sarcópticos, psorópticos y coriópticos en caballos. El tratamiento debe repetirse cada 12 días si es necesario, siguiendo la dilución específica de la especie señalada en la etiqueta.
Aunque ciertas formulaciones en aerosol de permetrina están etiquetadas para su uso contra la sarna en caballos, por lo general no se considera el compuesto de elección. Si se usa permetrina, los animales deben mojarse completamente con el producto y volverse a tratar a los 10-14 días.
Aunque no está indicado para el tratamiento de la sarna en caballos, la ivermectina oral a 200 mcg/kg administrada en dos dosis con un intervalo de 14 días (estudios de campo), o un único tratamiento con moxidectina oral a 400 mcg/kg, son eficaces para tratar la psoróptica, la corióptica y la sarcóptica en caballos.
Sarna psoróptica en caballos
Psoroptes ovis (anteriormente P equi) y P cuniculi (probablemente una variante de P ovis) infestan a los caballos, y es la causa de la sarna psoróptica. Aunque P ovis es raro en los caballos. Sin embargo, las infestaciones pueden producir lesiones en regiones del cuerpo que poseen mucho pelo, como por debajo del flequillo de la frente y de las crines, en la base de la cola, bajo la barbilla, entre las patas traseras, en la ubre y en las axilas. A veces P cunicui puede causar otitis externa en caballos y puede provocar sacudidas de cabeza.
El prurito es característico. Las lesiones comienzan como pápulas y alopecia y luego se convierten en gruesas costras hemorrágicas. Los ácaros se recogen con más facilidad de los raspados cutáneos que en la sarna sarcóptica.
Resultan eficaces los tratamientos tópicos y orales recomendados para otros tipos de sarna. El sulfuro de cal caliente está autorizado para su uso contra Psoroptes en caballos. El tratamiento debe repetirse cada 12 días si es necesario, siguiendo las instrucciones de dilución específica de la especie señalada en la etiqueta.
Aunque no está indicado para el tratamiento de la sarna en caballos, la ivermectina oral a 200 mcg/kg administrada en dos dosis con un intervalo de 14 días (estudios de campo), o un único tratamiento con moxidectina oral a 400 mcg/kg, son eficaces para tratar la psoróptica, la corióptica y la sarcóptica en caballos.
Sarna corióptica en caballos
La sarna corióptica está causada por la infestación de Chorioptes bovis (anteriormente C equi) y es la forma más común de sarna en los caballos. Los caballos de tiro suelen estar infestados, aunque todas las razas son propensas.
Las lesiones causadas por C bovis comienzan como una dermatitis prurítica que afecta a las extremidades distales, en torno al pie y al menudillo. Inicialmente se observan pápulas seguidas de alopecia, costras y engrosamiento de la piel. En los casos crónicos se desarrolla una dermatitis húmeda de la cerneja. Los caballos infestados pueden golpear con sus patas o frotar un pie contra la pata opuesta u objeto. La sarna corióptica es un diagnóstico diferencial de "talón graso" en caballos de tiro.
Los signos clínicos se reducen en verano, pero vuelven a aparecer cuando vuelve el tiempo frío. El curso de la enfermedad no tratada suele ser crónico; sin embargo, el pronóstico es favorable si se trata. Resultan eficaces los tratamientos tópicos y orales recomendados para otros tipos de sarna.
El sulfuro de cal caliente está autorizado para su uso contra Chorioptes en caballos. El tratamiento debe repetirse cada 12 días si es necesario, siguiendo la dilución específica de la especie señalada en la etiqueta. El tratamiento se facilita recortando el pelo largo de las zonas infestadas.
Aunque no está indicado para el tratamiento de la sarna en caballos, la ivermectina oral a 200 mcg/kg administrada en dos dosis con un intervalo de 14 días (estudios de campo), o un único tratamiento con moxidectina oral a 400 mcg/kg, son eficaces para tratar la psoróptica, la corióptica y la sarcóptica en caballos.
Sarna demodécica en caballos
La sarna demodécica en los caballos está causada por la infestación de Demodex equi o D caballi. Los ácaros de Demodex infestan los folículos pilosos y las glándulas sebáceas. D equi se encuentra en el cuerpo, mientras que D caballi en los párpados y el morro.
La sarna demodécica es poco común en los caballos. Puede manifestarse como parches de alopecia y descamación o bien como nódulos. Las lesiones aparecen en la cara, el cuello, los hombros y las extremidades delanteras. Esta enfermedad se ha descrito en asociación con disfunción de la porción intermedia de la hipófisis y con tratamientos crónicos con corticoesteroides. El prurito está ausente, por lo que las infecciones secundarias por excoriación son raras.
Demodex rara vez se trata en caballos, aunque hay pruebas limitadas de que las lactonas macrocíclicas pueden ser eficaces. También se ha documentado que las lesiones pueden resolverse sin tratamiento.
Trombiculidiasis en caballos
Los ácaros trombiculoides pueden parasitar la piel de los caballos, especialmente durante el final del verano y el comienzo del otoño, y causar trombiculidiasis. Los ácaros adultos se encuentran en invertebrados y en plantas; las larvas normalmente se alimentan de pequeños roedores. Sin embargo, pueden alimentarse de forma oportunista en humanos y animales domésticos, incluidos los caballos.
Las lesiones consisten en pápulas y habones intensamente pruríticos. En el momento del diagnóstico, se puede usar una piretrina tópica o un piretroide autorizado para caballos para matar cualquier larva que se esté alimentando.
Puede añadirse un tratamiento sintomático con un glucocorticoide para calmar el prurito y para reducir al mínimo el autotraumatismo y las infecciones secundarias asociadas. Se debe tratar cualquier infección secundaria. Los repelentes pueden ayudar a prevenir la infestación.
Ácaro de la paja en caballos
El ácaro de la paja normalmente se alimenta del material orgánico de la paja y del grano y pueden infestar de forma oportunista la piel de los caballos. Aparecen pápulas y habones en la cara y el cuello si los caballos se alimentan de un comedero de heno, y en el morro y en las patas si se alimentan del suelo. El prurito es variable. El mismo tratamiento de la trombiculidiasis puede utilizarse para las infestaciones por estos ácaros.