El exantema coital equino es una enfermedad venérea benigna de los caballos causada por el herpesvirus equino tipo 3. Los signos clínicos incluyen múltiples nódulos rojos circulares en los genitales de las yeguas y los sementales. El diagnóstico se basa en los signos clínicos y puede confirmarse mediante la identificación histológica del virus. No existe ninguna vacuna ni tratamientos especificos. Se recomienda el descanso sexual para permitir la curación de las lesiones y prevenir la diseminación.
Etiología y epidemiología del exantema coital equino
El exantema coital equino es una enfermedad venérea benigna de los caballos que probablemente se produce en todo el mundo. Afecta a ambos sexos y está causada por el herpesvirus equino tipo 3 (HVE-3). Este virus tiene un único tipo antigénico, pero además presenta variantes de placa pequeña y grande en cultivo tisular, lo que indica la posible variabilidad en la gravedad de los brotes infecciosos. Aunque la principal vía de transmisión es la venérea, se han descrito brotes transmitidos a través de material o instrumentos contaminados o mediante el empleo de un único guante para la exploración rectal de muchas yeguas. Probablemente esta sea la razón por la que el HVE-3 se ha aislado también en caballos que no se habían cubierto.
El exantema coital equino probablemente solo se transmite en la fase aguda de la enfermedad; una vez que las lesiones se han curado, los caballos parecen no excretar el virus. Sin embargo, no está clara la existencia de portadores: las cicatrices que persisten después de la curación pueden identificar a los potenciales portadores, aunque tales portadores asintomáticos no se han identificado. La inmunidad tiene una corta duración, aunque la evidencia obtenida a partir de los sementales muestra que es poco probable que la enfermedad se repita dentro de la misma temporada reproductiva.
Hallazgos clínicos del exantema coital equino
Cortesía del Dr. Thomas Lane.
En yeguas, los signos clínicos del exantema coital equino se desarrollan 4-8 días después del contacto sexual o examen veterinario y se manifiestan por la aparición de múltiples nódulos circulares de color rojo de hasta 2 mm de diámetro en la mucosa vulvar y vaginal, senos del clítoris y la piel del perineo. Estas lesiones evolucionan hasta convertirse en vesículas y posteriormente pústulas que finalmente se rompen dejando zonas ulceradas, dolorosas y poco profundas que pueden unirse formando lesiones mayores. Puede desarrollarse edema en la zona perineal y llegar a extenderse a la zona situada entre los muslos. A veces pueden aparecer úlceras en las mamas, los labios y la mucosa nasal. Es frecuente la infección bacteriana secundaria de las úlceras por Streptococcus spp, lo que causa que estas aumenten de tamaño y exuden una descarga mucopurulenta. En estos casos el caballo puede estar febril. A menos que tenga lugar una infección bacteriana secundaria, se produce la cicatrización completa de la piel en 3 semanas; sin embargo, las úlceras del clítoris y la vagina cicatrizan más lentamente. Las lesiones cutáneas persisten durante largos periodos de tiempo en forma de cicatrices despigmentadas. No obstante, las tasas de gestación no disminuyen.
Las lesiones en los sementales son similares a las de las yeguas y se producen tanto en el pene como en el prepucio. Como resultado, la penetración es dolorosa y el semental puede mostrar reticencia a la cópula. Si se produce la monta durante la fase ulcerativa, las úlceras pueden sangrar y contaminar el eyaculado, reduciendo la viabilidad del esperma.
Diagnóstico del exantema coital equino
Basado en los síntomas clínicos y confirmado por microscopía electrónica
El diagnóstico presuntivo de exantema coital equino se basa en los signos clínicos y se confirma mediante la identificación del virus (utilizando microscopía electrónica) en las células procedentes de los bordes de las lesiones ulcerosas. Los típicos cuerpos de inclusión intranucleares de los herpesvirus también pueden observarse en las preparaciones citológicas o histológicas. Además pueden ser diagnósticas las muestras obtenidas en la fase aguda y convaleciente para neutralización sérica o pruebas de fijación del complemento; sin embargo, estas pruebas se deben interpretar cuidadosamente dado que tanto el HVE-1 como el HVE-4 también se han aislado de las lesiones genitales.
Tratamiento y prevención del exantema coital equino
El descanso sexual es necesario para permitir que las úlceras cicatricen y evitar la propagación a los caballos no infectados.
El descanso sexual es esencial para permitir la cicatrización de las úlceras y prevenir la diseminación del exantema coital equino. También es aconsejable el uso de pomadas antibióticas para prevenir infecciones secundarias. Los caballos afectados deben mantenerse aislados hasta que todas las lesiones hayan cicatrizado y se debe utilizar material desechable en las exploraciones clínicas. Durante la fase aguda de la enfermedad, las yeguas solo se deben cubrir por inseminación artificial. No hay ninguna vacuna disponible. Todos los caballos deben explorarse cuidadosamente antes de la cubrición, teniendo en cuenta que el periodo de incubación de esta enfermedad es de hasta 10 días.
Puntos clave
El exantema coital equino es una enfermedad venérea de los caballos causada por el herpesvirus equino tipo 3, que probablemente se produce en todo el mundo.
El diagnóstico se basa en los síntomas clínicos y se confirma mediante microscopía electrónica.
El descanso sexual es necesario para permitir la curación de las úlceras y prevenir la transmisión.
Para más información
Consulte también la información para propietarios sobre el exantema coital equino.