Cortesía del Dr. Thomas Lane.
La mastitis aguda afecta, en ocasiones, a las yeguas lactantes, con mayor frecuencia durante el periodo de secado, en una o ambas glándulas. Streptococcus zooepidemicus es el patógeno más frecuente, aunque también se encuentran S equi, S equisimilis, S agalactiae y S viridans. También se ha descrito una variedad de bacterias gramnegativas. Se desarrolla una inflamación dolorosa notable de la glándula afectada y los tejidos adyacentes, y la secreción es con frecuencia serofloculenta. Puede haber fiebre y depresión. La yegua puede caminar rígidamente o quedarse de pie con las extremidades posteriores separadas debido a la incomodidad. En casos graves se puede considerar la hemimastectomía o la mastectomía.
El tratamiento es similar al de las vacas, pero cuando se emplean infusiones intramamarias, se deben insertar por separado en ambos orificios del pezón. Se ha sugerido que se incluya trimetoprima-sulfamida (basado en 5 mg/kg de trimetoprima, PO, dos veces al día) o una combinación de penicilina (20,000 UI/kg, IM, dos veces al día) y gentamicina sulfato (2 mg/kg, IV, tres veces al día) en la terapia sistémica. El tratamiento debe continuarse en función del cultivo y antibiograma. Sin un tratamiento rápido, se pueden producir abscesos o induración de la glándula. Se tienen pocos datos acerca de la frecuencia y la persistencia de las infecciones intramamarias subclínicas en las yeguas.
Para más información
Consulte también la información para propietarios sobre la mastitis en yeguas.
