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Atención médica rutinaria de los peces

Última revisión/modificación feb 2020

Prevenir las enfermedades es siempre preferible a tratarlas. En la mayoría de los casos, un programa integral de gestión de la salud de los peces debe centrarse en la calidad del agua, la nutrición, el saneamiento (mantenimiento y limpieza) y la cuarentena.

Signos de enfermedad

Los peces muestran signos de enfermedad de diversas maneras. Algunos signos generales de enfermedad incluyen cambios en el comportamiento de natación y cambios notables en el color o el estado del cuerpo y las aletas ( ver Signos comunes de enfermedad en peces). Las secciones de este análisis que cubren los sistemas orgánicos individuales también enumeran signos más específicos relacionados con ciertas enfermedades.

Administrar medicación

Usted no podrá darle a su pez enfermo una pastilla o una cucharada de medicina. Sin embargo, es posible administrar medicamentos a los peces para tratar diversos trastornos. Los métodos utilizados para administrar la medicación a los peces domésticos incluyen la aplicación tópica, la inyección, la inmersión y la administración en los alimentos. Algunos de estos (como las inyecciones o la cirugía) deben ser realizados por su veterinario, mientras que otros pueden hacerse en casa. Por ejemplo, muchas ulceraciones y llagas pueden tratarse con una pomada tópica. Varios problemas de escamas, piel y agallas, especialmente los parásitos, pueden tratarse colocando al pez en un tanque de agua medicada durante un periodo de tiempo o añadiendo medicación al tanque principal o al estanque. Algunos peces de agua dulce pueden tratarse por inmersión temporal en agua ligeramente salada, y los peces de agua salada a veces pueden tratarse por inmersión en agua dulce o menos salada. Algunos problemas internos también pueden tratarse con métodos de inmersión. Los problemas internos simples a menudo se pueden tratar con alimentos medicados. Las enfermedades más complicadas necesitan tratamiento veterinario.

Signos comunes de enfermedad en peces

  • Letargo

  • No comer.

  • Respiración lenta o rápida.

  • Pérdida de color.

  • Decoloración o moteado.

  • Manchas.

  • Cicatrices.

  • Úlceras (llagas abiertas).

  • Pérdida de escamas.

  • Escamas que sobresalen o se levantan.

  • Hinchazón o distensión.

  • Pérdida de peso.

  • Flotar, ir a la deriva o nadar erráticamente en posiciones inusuales.

  • Tumores y crecimientos quísticos.

  • Crecimientos hinchados y/o difusos.

Ciertos fármacos han sido aprobados por la Food and Drug Administration (FDA) de EE. UU. para su uso en los peces de destino alimentario, mientras que otros están listados como de "bajo riesgo regulatorio". Estos fármacos y compuestos pueden usarse para tratar peces de compañía. Debido a que hay relativamente pocos fármacos aprobados para su uso en los peces, los veterinarios a veces también usan fármacos y compuestos que no han sido aprobados por la FDA en condiciones controladas. La normativa federal y estatal se preocupa a la hora de tratar los estanques exteriores porque la contaminación de las aguas subterráneas y de otros animales puede ser un problema.

Cuidado preventivo

El mejor cuidado preventivo para mantener sanos a los peces y su entorno incluye proporcionar una buena dieta, controlar la calidad del agua y mantener un programa regular de limpiezas, cambios de agua y reposición de filtros ( ver Mantenimiento esencial). Las limpiezas deben incluir remover la grava u otro sustrato para liberar los desechos sólidos que han quedado atrapados. Los desechos pueden ser eliminados por las unidades de filtración o por el uso de una red. Se puede usar un sistema de vacío y agua a presión para eliminar los desechos sólidos de la grava mientras se elimina el agua para un cambio de agua. Cualquier agua nueva debe declorarse antes de añadirse al acuario o al estanque. Si es necesario, se debe añadir sal y otros suplementos al agua nueva.

Mantenimiento esencial

Diariamente:

  • Compruebe los peces, la temperatura del agua y el equipo.

  • Dé de comer a los peces y elimine los restos de comida.

  • Vacíe el skimmer de proteínas (tanques de agua salada).

Semanalmente:

  • Limpie la tapa de cristal o la bandeja de condensación.

  • Agregue el agua necesaria para compensar la evaporación.

  • Elimine las algas del cristal.

Cada 2 semanas:

  • Cambie el agua (la cantidad cambiada depende del nivel de población).

  • Retire las hojas muertas de las plantas vivas y recórtelas si es necesario.

  • Compruebe el pH, la alcalinidad total, los niveles de amoníaco, los niveles de nitrato y nitrito, la densidad específica (para tanques de agua salada y salobre) y el flujo del filtro (límpielo si es necesario).

  • Remueva la parte superior del sustrato y elimine los residuos.

Cada 1 a 3 meses:

  • Reemplace el carbón en el filtro.

  • Limpie el skimmer de proteínas (tanques de agua salada), las tuberías del filtro y la manga de cuarzo del esterilizador ultravioleta (si corresponde).

  • Filtros de potencia y bomba de aire de servicio.

Cada 6 meses:

  • Compruebe la iluminación.

  • Reemplace los tubos esterilizadores ultravioleta.

Los objetos decorativos deben limpiarse de vez en cuando. Las hendiduras, grietas y agujeros de las rocas, la madera, los corales decorativos y otros objetos pueden capturar residuos que pueden contaminar el agua. Retire las decoraciones del acuario y póngalas bajo agua caliente. Puede ser necesario frotar o restregar con una toalla o un cepillo limpio para las piezas más porosas u obviamente sucias. Deje que las piezas se escurran completamente hasta que ya no goteen. A continuación, pueden devolverse al acuario sin mucha preocupación por los daños causados por el cloro.

Todos los sistemas de filtración, independientemente del tipo (incluidos los filtros de goteo, los filtros de depósito, los filtros de arena, los filtros de sumidero, los esterilizadores ultravioleta y otros) necesitan un mantenimiento regular. Los cartuchos reemplazables deben cambiarse una vez al mes, o con mayor frecuencia si el filtro de tejido se obstruye con desechos y el carbón activado pierde eficacia.

Cuarentena

Cuarentena significa mantener a los animales nuevos o enfermos en un acuario separado durante un periodo de tiempo específico antes de unirse a otros. El propósito de la cuarentena es evitar la introducción accidental o la difusión de enfermedades infecciosas a una población establecida de peces de acuario. Los peces valiosos como mascotas deben mantenerse en cuarentena durante al menos 30 a 60 días antes de añadirlos a la población general. Esto puede evitar la propagación de la enfermedad desde los peces nuevos (o enfermos) a toda la población. Se puede instalar un tanque de cuarentena para peces nuevos o para aquellos que muestren signos de enfermedad. El aislamiento del pez en cuestión también facilita la observación y el tratamiento. Los sistemas de cuarentena deben descomponerse y desinfectarse completamente entre usos. Una vez iniciada la cuarentena, no se pueden añadir nuevos peces o se debe reiniciar el periodo de cuarentena.

Vacunación

En las explotaciones de acuicultura a gran escala, como los criaderos de salmón, la vacunación es bastante eficaz y se realiza con frecuencia. Las vacunas son todavía poco frecuentes para los peces de compañía, pero es probable que haya más vacunas disponibles, como la que puede prevenir la enfermedad ulcerosa, una infección grave causada por Aeromonas salmonicida, Aeromonas hydrophila u otras bacterias en carpas koi y carpines dorados. La vacuna puede administrarse por inyección o por inmersión, siendo el tamaño del pez el que determina el método de administración. No se recomienda la vacunación rutinaria de las carpas koi o de los carpines dorados.

Para todas las vacunas, la temperatura del agua afecta a la velocidad de la respuesta inmunitaria o la rapidez con que el organismo acumula anticuerpos frente a la enfermedad. Un veterinario experimentado o un aficionado puede aconsejarle sobre cómo administrar correctamente las vacunas a los peces.