logoVERSIÓN PARA PROFESIONALES

Cianuro como riesgo laboral veterinario

PorRhian B. Cope, BVSc, BSc, PhD, DABT, DABVT, FACTRA
Última revisión/modificación mar 2021

    Las principales fuentes de exposición al cianuro en la medicina veterinaria incluyen el contenido ruminal de los animales en pastoreo que han consumido o se han intoxicado con glucósidos cianogénicos vegetales (p. ej., durante los procedimientos de necropsia/recogida de muestras), la manipulación o exposición a agentes pesticidas frente a vertebrados que contengan cianuro (o animales intoxicados por ellos) y fuentes de combustión (particularmente de materiales que contienen nitrógeno como plásticos, lana, seda). Las soluciones acuosas de cianuro se denominan comúnmente ácido prúsico, y el ácido cianhídrico y el formonitrilo son sinónimos. (También ver Intoxicación por cianuro.)

    Las soluciones de cianuro de hidrógeno son incoloras o líquidas de color azul pálido a temperatura ambiente. El cianuro es muy volátil y altamente tóxico, y pueden desarrollarse rápidamente concentraciones inflamables/explosivas a temperaturas y presiones normales, especialmente en espacios cerrados.

    El gas de cianuro de hidrógeno tiene un olor característico a almendra amarga; sin embargo, la capacidad de las personas para detectar el olor está determinada genéticamente. Los individuos anósmicos (20-40 % de la población humana) no son capaces de detectarlo. Por consiguiente, no se puede confiar en la detección de olores para su detección y advertencia en relación con la exposición. Se recomienda encarecidamente el uso de dispositivos de detección de cianuro y/o la prueba del aire respirable con un tubo Drӓger o un método de prueba similar antes de entrar en cualquier entorno donde pueda haber cianuro.

    La principal vía potencial de exposición en el lugar de trabajo en medicina veterinaria es la inhalación. Puede producirse una absorción cutánea sustancial si la concentración atmosférica es elevada o si la piel entra en contacto con soluciones de cianuro. Las temperaturas ambientales elevadas y la humedad elevada parecen aumentar la absorción cutánea. La contaminación de la piel o de la ropa con materiales que contienen cianuro puede provocar la liberación de vapores de cianuro y su inhalación. La exposición por cualquier vía puede causar intoxicación sistémica. El cianuro también irrita la piel y los ojos. Los niños son más sensibles a la intoxicación debido a su mayor ventilación por minuto por kg de peso corporal.

    Las exposiciones significativas al cianuro provocan la muerte en pocos minutos debido a la detención de la fosforilación oxidativa mitocondrial, la hipoxia histotóxica y la acidosis metabólica grave, lo que da lugar a efectos sobre el SNC, cardiovasculares y respiratorios de inicio rápido.

    Los signos nerviosos se desarrollan muy rápidamente en las personas y son inespecíficos: excitación, mareos, náuseas, vómitos, dolor de cabeza y debilidad, que progresa a somnolencia, espasmo tetánico, trismo, convulsiones, alucinaciones, pérdida del conocimiento y coma terminal. Los signos cardiovasculares incluyen arritmias e hipotensión intratable. Los signos respiratorios suelen incluir dificultad para respirar y opresión en el pecho, respiración acelerada y aumento de la profundidad de la respiración que progresa a respiración agónica. Puede o no haber edema pulmonar y cianosis de piel. La acidosis metabólica por desequilibrio aniónico grave e intratable debida a la acidosis láctica se desarrolla rápidamente.

    Los supervivientes de la intoxicación por cianuro suelen desarrollar alguna forma de daño cerebral hipóxico, y esto puede estar asociado con cambios de personalidad, déficit de memoria, trastornos en los movimientos musculares voluntarios y aparición de movimientos involuntarios (síndromes extrapiramidales).

    Las víctimas expuestas únicamente al gas de cianuro de hidrógeno no presentan riesgos secundarios de contaminación para las personas que los tratan, pero no se debe intentar la reanimación sin una barrera. Las víctimas cuya ropa o piel están contaminadas con líquido o solución de cianuro de hidrógeno, pueden contaminar secundariamente al personal que les atiende, por contacto directo o mediante la liberación de gases. Se debe evitar el contacto dérmico con víctimas contaminadas con cianuro o con el contenido gástrico de las víctimas que puedan haber ingerido materiales que contengan cianuro.

    Los veterinarios intoxicados por cianuro necesitan un tratamiento rápido, una rápida administración de antídotos y cuidados especializados. El personal de rescate que planea entrar en una "zona caliente" de contaminación debe tener mucho cuidado. Se han producido muchas víctimas humanas debido a intentos bien intencionados pero equivocados de rescate de zonas calientes contaminadas con cianuro de hidrógeno. El rescate y el tratamiento de emergencia es mejor dejarlo en manos de aquellos con entrenamiento especializado en estas áreas.