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Triquinelosis en animales

(Triquinosis)

Revisado/Modificado mar 2021

La triquinelosis es una afección zoonótica que afecta a los mamíferos, incluidos los humanos, las aves y los reptiles, causada por la infestación por Trichinella spp. Las personas se infectan más comúnmente al comer carne de cerdo mal cocinada. Mientras que la infestación en animales no se suele detectar y tiene una importancia clínica mínima, la triquinelosis es un riesgo importante para la salud pública humana a nivel mundial. La prevención de la enfermedad en las personas se logra mediante prácticas apropiadas de inspección de la carne y una cocción o congelación adecuada de la carne y los productos cárnicos.

Las infestaciones por Trichinella sp están causadas por vermes redondos (nematodos) en los mamíferos, incluidos los humanos, así como en las aves y algunas especies de reptiles. La mayoría de los mamíferos, incluidos los omnívoros y los carnívoros, pueden verse afectados. En los seres humanos, estos parásitos causan triquinosis, una enfermedad parasitaria de importancia para la salud pública. Las infestaciones en humanos son el resultado del consumo de carne infestada insuficientemente cocinada o de productos derivados de la carne, por lo general carne de cerdo doméstico o silvestre, así como carne de oso, caballo o morsa. En ocasiones, la carne o los productos cárnicos de otras especies han estado implicados.

Los animales infestados de forma natural no muestran ningún signo clínico de la enfermedad, excepto en casos raros, aunque se ha descrito que pueden albergar 1000 larvas de parásitos por gramo de tejido muscular. No existe tratamiento para la triquinelosis en animales, y las infestaciones por Trichinella sp solo se detectan mediante pruebas de laboratorio post mortem de muestras de tejido muscular; hay varias pruebas específicas disponibles. El número de casos humanos ha disminuido mucho en los últimos 50 años, en parte debido al traslado a instalaciones de producción modernas (confinamiento reducido) que disminuyen o eliminan la exposición de los cerdos domésticos a los roedores silvestres y a otros animales silvestres.

Etiología y epidemiología de las infecciones por Trichinella sp en animales

El género Trichinella se considera actualmente un complejo de nueve especies y 4 genotipos adicionales (T6, T8, T9 y T913) de estatus taxonómico indeterminado. Aparte de la existencia de dos clados definidos por la presencia o ausencia de una cápsula de colágeno (quiste) que rodea a las larvas del parásito en los músculos infestados, no hay diferencias morfológicas. Cada taxón puede identificarse mediante la prueba de PCR y la secuenciación del ADN realizada en larvas recogidas de muestras de músculos de animales o humanos infestados.

T spiralis (T1) es la más común y ampliamente distribuida de las especies encapsuladas que afectan a las personas y a los animales domésticos en las regiones templadas; tiene una alta infectividad para los cerdos y los roedores, presenta baja resistencia a la congelación y es ampliamente infectiva para la mayoría de los hospedadores silvestres (vida salvaje). Las otras especies formadoras de quistes incluyen:

  • T nativa (T2), que se encuentra en los carnívoros árticos y subárticos, en los que las larvas pueden sobrevivir a la congelación hasta 5 años.

  • T britovi (T3), que se encuentra principalmente en carnívoros y más raramente en cerdos domésticos y silvestres en todo el continente europeo, el noroeste de África y el sudoeste de Asia.

  • T murrelli (T5), restringido a los carnívoros de las regiones templadas de América del Norte.

  • T nelsoni (T7), que se encuentra en carnívoros y con menos frecuencia en cerdos silvestres en el este y sur de África.

  • T patagoniensis (T12), encontrado en carnívoros de América del Sur.

Hay otros cuatro genotipos encapsulados: Trichinella T6, que es muy similar a T nativa y se encuentra en carnívoros de las regiones árticas y subárticas de América del Norte; T8, que muestra similitudes con T britovi y está presente en carnívoros del sur de África; T9, que solo se ha identificado en carnívoros de Japón; y T13, que se ha descubierto recientemente en carnívoros del noroeste de Canadá.

Hay tres especies adicionales: T pseudospiralis (T4), T papuae (T10) y T zimbabwensis (T11), que constituyen el clado no encapsulado (es decir, carecen de un quiste en el músculo infestado). T pseudospiralis tiene una distribución cosmopolita y es la única especie capaz de infectar a mamíferos y aves. T papuae circula entre los mamíferos (p. ej., cerdos silvestres) y los reptiles (cocodrilos de agua salada y tortugas de caparazón blando) de Australasia y el sudeste de Asia. T zimbabwensis infesta a los mamíferos carnívoros (p. ej., leones, leopardos, hienas manchadas), los cocodrilos del Nilo y los varanos del Nilo en el África subsahariana.

La infección se produce por ingestión de larvas que parasitan las células musculares estriadas. La pared del quiste se digiere en el estómago y las larvas libres penetran en la mucosa duodenal y yeyunal. En el intervalo de ~4 días, las larvas alcanzan la madurez sexual. Después de la cópula, las hembras (3-4 mm) penetran más profundamente en la mucosa y descargan larvas vivas (hasta 1500) durante unas 4-16semanas. Después de la reproducción, los gusanos adultos mueren y suelen digerirse. Las larvas jóvenes (0,1 mm) migran a través del sistema linfático y se transportan por el sistema portal hacia la circulación periférica y alcanzan el músculo estriado, donde penetran en las células musculares individuales. Crecen rápidamente (hasta 1 mm) y comienzan a enroscarse dentro de la célula, por lo general una por célula.

En los taxones encapsulados, la formación de cápsulas comienza ~15 días después de la infestación y se completa a las 4-8 semanas, momento en el cual las larvas son infestantes. Las células infestadas degeneran a medida que la larva crece, seguida de una calcificación que se produce a diferentes velocidades en varios hospedadores. Las larvas permanecen viables en los quistes durante años y su desarrollo continuará solo si son ingeridas por otro hospedador adecuado. Los músculos más afectados en los cerdos son el diafragmático, el lingual, el masetero y los intercostales.

Hallazgos y diagnóstico clínicos de las infecciones por Trichinella sp en animales

  • Examen microscópico de muestras de biopsia

  • Digestión artificial de tejidos musculares mediante una solución de HCl-pepsina

La mayoría de las infecciones por Trichinella sp en animales domésticos y silvestres no se diagnostican. In peopleEn las personas, las infecciones importantes producen una enfermedad grave con tres fases clínicas (intestinal, invasión muscular y convalecencia) y ocasionalmente la muerte.

El examen microscópico de una muestra de biopsia muscular (por lo general del diafragma) puede confirmar, pero no excluir necesariamente, la infestación por Trichinella sp. La prueba de ELISA con antígenos excretores-secretores (ES) es un medio fiable para detectar anticuerpos frente a Trichinella en cerdos; sin embargo, esta prueba es útil para la vigilancia epidemiológica solo debido a los largos periodos de detección y a las reacciones cruzadas con otros patógenos. Puede no producirse una seroconversión hasta semanas tras la infestación, aunque es posible detectar una cantidad de tan solo 0,01 larvas por gramo de tejido. Además, los anticuepros anti-Trichinella pueden no ser detectables incluso en animales que todavía albergan larvas infestantes.

La prueba diagnóstica de referencia para detectar la infestación por Trichinella en animales es la digestión artificial de muestras de tejido muscular con una solución de HCl-pepsina. Esta prueba no incluye ningún control y requiere personal específicamente capacitado. El uso de pruebas de ELISA con antígenos ES es el medio diagnóstico más utilizado para detectar infestaciones por Trichinella en humanos con seroconversión que se producen 2-3 semanas después de la infestación. Sin embargo, en personas infestadas por pocas larvas, la seroconversión puede darse después de 5-6 semanas, cuando se ha producido una recuperación completa. No suele existir tratamiento para los animales. Las personas infectadas se tratan con albendazol o mebendazol y corticoesteroides. Dado que los antihelmínticos se absorben mal en la luz intestinal, no suelen alcanzar las larvas enquistadas en las células musculares. En general, cuanto más tarde se prescribe el tratamiento, mayor es la probabilidad de que las personas infestadas alberguen larvas viables durante años.

Control de infecciones por Trichinella sp en animales

  • Control de roedores

  • Supervisión apropiada de los alimentos para consumo animal

  • Prácticas de inspección de la carne

  • Calentamiento o congelación adecuados de la carne de cerdo para consumo humano

El tratamiento de la infecciones por Trichinella sp suele ser poco práctico en los animales. El objetivo es evitar la ingestión y por tanto la infestación por cualquier animal o humano de larvas de Trichinella. En el caso de los cerdos, esto se puede lograr con un manejo adecuado, que debe incluir el control de los roedores, cocinar los desperdicios con los que se alimentan los cerdos (durante 30 min a 100 °C) y prevenir el canibalismo (es decir, morderse el rabo) y el acceso a los animales silvestres muertos. La infestación por Trichinella sp nunca se ha descrito en cerdos criados en condiciones controladas de alojamiento.

La inspección de la carne buscando formas viables de triquina en el momento del sacrificio (mediante triquinoscopia o métodos de digestión) es eficaz para evitar la infestación humana en muchos países. En la UE, todos los animales sensibles a Trichinella destinados al consumo humano deben someterse a pruebas de detección de estos parásitos mediante pruebas de digestión artificial, a menos que los cerdos procedan de explotaciones controladas. En América del Norte se asume que la carne de cerdo puede estar infestada; por tanto, los productos de cerdo etiquetados como "listos para comer" tienen que haberse procesado mediante un calentamiento, congelación o curación adecuados para destruir las larvas antes de su comercialización. Es necesario cocinar otros productos cárnicos derivados del cerdo para garantizar que todo el tejido se calienta hasta una temperatura interna de 63 °C para la carne asada o de 71 °C para la carne picada.

La congelación de la carne de cerdo a una temperatura y un tiempo adecuados también es considerada eficaz (−15 °C durante 20 días, −23 °C durante 10 días o −30 °C durante 6 días). No se puede confiar en la congelación para eliminar los quistes en la carne que no sea de cerdo. Por ejemplo, las larvas de T nativa pueden sobrevivir en el músculo congelado de los osos hasta 5 años.

Puntos clave

  • Los mamíferos carnívoros y omnívoros silvestres son los principales hospedadores reservorios de los parásitos Trichinella sp.

  • Las prácticas de cría de alto riesgo incluyen la alimentación intencional de desperdicios de comida, que pueden contener restos de carne de cerdo, o la exposición no intencional a cadáveres de cerdos muertos o animales silvestres infestados a través de pastos libres no protegidos.

  • Los animales infestados naturalmente no muestran ningún signo clínico de infestación, excepto en raras ocasiones. No existe ningún tratamiento.

  • La prueba serológica (ELISA) puede usarse para controlar la infestación en explotaciones de cerdos, pero no detectará a todos los animales infestados.

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