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Vendajes y apósitos de heridas para animales pequeños

PorKevin P. Winkler, DVM, DACVS
Revisado/Modificado jul 2023

Vendajes para pequeños animales

Los objetivos del vendaje incluyen lo siguiente:

  • Limitar la hemorragia.

  • Inmovilizar el área.

  • Prevenir un mayor traumatismo o contaminación de la herida.

  • Prevenir la desecación de la herida.

  • Absorber el exudado.

  • Controlar la infección.

  • Ayudar en el desbridamiento mecánico de la herida.

Cuando se arman los vendajes, se deben seguir varios principios para evitar complicaciones. Los vendajes han de estar suficientemente acolchados, aplicados de modo uniforme y cómodo, formados por tres capas (primaria, secundaria y terciaria) y colocados para evitar el traumatismo del tejido de granulación o del epitelio neoformado.

La primera capa, o capa primaria (también llamada capa de contacto), contacta directamente con la herida para permitir que el líquido del tejido pase a través de ella hacia la capa secundaria y puede ser un apósito adherente o no adherente.

Los apósitos no adherentes entran en contacto con la herida sin pegarse y pueden ser semioclusivos (permitiendo la penetración del aire y la salida del exudado de la superficie de la herida) u oclusivos (impermeables al aire y a los líquidos). Un apósito no adherente suele ser una malla fina o un material antiadherente de espuma embebido en parafina o pomada a base de vaselina o recubierto con un polímero fino para evitar que se pegue a la herida. Esta capa evita la desecación del tejido y provoca un traumatismo mínimo.

Un vendaje adherente utiliza un material de malla ancho que permite que el tejido y los desechos se incorporen al vendaje. Esos residuos se retiran entonces con el cambio de vendaje. Sin embargo, debido a que este tipo de vendaje no es selectivo, el tejido sano también puede resultar dañado.

Los vendajes adherentes se clasifican según la composición de la capa primaria:

  • Los vendajes adherentes secos (también llamados vendajes seco a seco) consisten en una gasa seca, absorbente y de malla ancha que se aplica a la herida y se retira después de que la capa primaria haya absorbido el líquido y los restos y luego se haya secado. Los vendajes causan dolor al retirarlos, pero permiten un desbridamiento considerable del tejido.

  • Los vendajes adherentes húmedos (también llamados vendajes húmedo a seco) se hacen con una gasa estéril de malla ancha humedecida con una solución salina (NaCl al 0,9 %), que se coloca directamente sobre la herida y se retira después de que la capa primaria se haya secado (eliminando los restos y el exudado de la herida por acción de la mecha). Su extracción también es dolorosa, pero provoca menos desecación del tejido que el vendaje seco adherente.

La técnica de vendaje húmedo a húmedo es similar a la utilizada para un vendaje húmedo a seco, excepto que la capa de contacto no se deja secar antes de retirar el vendaje. El vendaje húmedo a húmedo tiende a dañar el lecho del tejido porque lo mantiene demasiado húmedo.

La capa secundaria del vendaje absorbe el líquido tisular, acolcha la herida y sostiene o inmoviliza la extremidad. Esta capa está formada habitualmente por un vendaje acolchado o algodón enrollado.

La capa terciaria sirve para mantener las capas primaria y secundaria en su lugar, proporcionar presión y mantener las capas internas protegidas del ambiente. Esta capa está formada por cinta adhesiva o venda elástica.

Los vendajes tienen varias complicaciones potenciales. Los vendajes que están demasiado apretados pueden provocar un compromiso neurovascular y la consiguiente necrosis tisular. En algunos casos, este daño puede provocar la pérdida de una extremidad.

Los vendajes se usan para ayudar a mantener las heridas húmedas para una cicatrización óptima. Esto también puede dar lugar a un exceso de humedad en contacto con la piel sana. Las enzimas en el exudado de la herida pueden causar daño cutáneo asociado a la humedad (DCAH) en piel sana. El DCAH también puede inducirse por la retención de orina o materia fecal dentro del vendaje.

Existen cremas de barrera comerciales disponibles para proteger la piel sana del DCAH.

Apósitos para pequeños animales

Los apósitos están diseñados para ayudar en la cicatrización de heridas.

El apósito ideal debería cumplir los siguientes atributos:

  • No tóxico.

  • Protege la herida.

  • Mantiene el ambiente húmedo.

  • Es mínimamente doloroso para el paciente.

  • Es rentable.

Los apósitos también pueden ayudar en el desbridamiento, absorber el exudado o administrar agentes tópicos a la herida. Esos agentes tópicos pueden incluir miel, plata, otros antimicrobianos o cualquier otro agente que acelere la cicatrización de las heridas.

Tabla
Tabla

Los apósitos de hidrogel tienen un gran contenido de líquido, que añade agua al lecho de la herida. Diseñados para heridas secas o necróticas, estos apósitos no deben usarse en heridas muy exudativas. Estos apósitos pueden causar la maceración del tejido sano perilesional.

Los apósitos hidrocoloides son apósitos oclusivos que son casi impenetrables para las bacterias. Pueden aportar líquido a la herida y son útiles en heridas secas. El apósito permite el desbridamiento autolítico manteniendo la herida húmeda. Los apósitos hidrocoloides pueden causar maceración del tejido sano que rodea la herida. Debido a las diferencias en la fisiología de la piel, estos apósitos no se adhieren bien a la piel de la mayoría de los pacientes veterinarios.

Los apósitos de hidroespuma pueden estar compuestos de poliuretano o silicona. Muchos de los apósitos más nuevos también incorporan plata nanocristalina. Debido a la naturaleza de la espuma, estos apósitos pueden absorber un exudado sustancial. Además, pueden añadir algo de aislamiento y protección a la herida. Un vendaje compresivo alrededor del apósito puede comprometer algunos de los efectos beneficiosos de un apósito de espuma.

Los apósitos de alginato suelen contener calcio y también pueden combinarse con plata o miel. Indicados para heridas exudativas, estos apósitos absorben el exudado de la herida para formar un gel en la superficie de la herida. Los alginatos también tienen algunos beneficios hemostáticos y causan un dolor mínimo al extraerlos. Están contraindicados en heridas secas y no se deben usar sobre hueso o tendón expuesto.

Los apósitos de microcorriente (AMC) son aquellos que suministran una microcorriente de bajo nivel a la herida para ayudar a la cicatrización. Los AMC originales eran artículos voluminosos que requerían una fuente de energía. La nueva tecnología ha permitido el desarrollo de pequeños AMC inalámbricos usando un diseño de matriz de puntos de metales alternos en el apósito. La corriente eléctrica de bajo nivel se crea por el contacto del AMC con la humedad del exudado de la herida.

Los AMC afectan a la cicatrización de heridas a través de múltiples mecanismos. En la fase inflamatoria, los AMC pueden disminuir la duración de la inflamación además de tener efectos antibacterianos. En la fase proliferativa, los AMC parecen potenciar la angiogénesis, atraer fibroblastos y acelerar la reepitelización.

Los apósitos antimicrobianos están disponibles en múltiples formas y suelen contener nanopartículas metálicas, miel o polihexametileno biguanida. Estos apósitos están indicados si se sospecha que la contaminación bacteriana retrasa la cicatrización de la herida. Deben usarse hasta 2 semanas y luego revaluarse. Si no hay mejoría, se debe revaluar la elección del apósito.

Puntos clave

  • Se usan apósitos de hidrogel e hidrocoloide para ayudar a mantener húmedas las heridas secas.

  • Las heridas con exceso de exudado pueden cubrirse con apósitos de espuma, que pueden absorber líquido de la herida.

  • Los apósitos de alginato, que forman un gel protector húmedo, se usan en heridas con exudado.

  • Los apósitos de microcorriente pueden usarse para acortar la fase inflamatoria de la cicatrización de heridas.

Para más información

  • Fossum TW. Small Animal Surgery. 4th ed. Elsevier Mosby; 2013.

  • Mann FA, Constantinescu GM, Yoon H. Fundamentals of Small Animal Surgery. Wiley-Blackwell; 2011.

  • Tobias KM, Johnson SA. Veterinary Surgery: Small Animal. Elsevier Saunders; 2012.

  • Consulte también la información para propietarios sobre vendajes y apósitos.