El granuloma eosinofílico equino (también llamado granuloma eosinofílico con degeneración del colágeno, necrobiosis nodular del colágeno o granuloma colagenolítico) es la enfermedad cutánea nodular más común en caballos. Hay muchas causas propuestas; sin embargo, las reacciones por picadura de insecto son las más probables. También puede haber traumatismos y otras alergias ambientales. Muchos granulomas colagenolíticos se producen durante los meses más cálidos del año y pueden recidivar estacionalmente. Algunos pueden persistir durante todo el año o aparecer de forma distintiva bajo las zonas de la guarnición y la silla de montar, donde se producen presiones y traumatismos.
Las lesiones varían en tamaño y número desde menos de 0,5 cm hasta más de 5 cm y se suelen producir en el cuello, el tronco y el dorso. Las lesiones son masas redondas o de forma irregular que no pican. Algunos caballos pueden desarrollar una forma generalizada con cientos de nódulos del tamaño de un guisante en la mayor parte del cuerpo. La piel suprayacente suele ser normal, pero en ocasiones puede abrirse y ulcerarse. Las lesiones más crónicas pueden calcificarse y volverse "duras como piedras"; estas lesiones son a menudo las más difíciles de tratar eficazmente.
El tratamiento más a menudo implica dosis relativamente altas de corticoesteroides administradas por la boca o por inyección. Las lesiones persistentes pueden inyectarse con formas más potentes de corticoesteroides. Los antibióticos también pueden ser útiles para controlar infecciones secundarias relacionadas con reacciones a cuerpos extraños. A veces es necesaria la extirpación quirúrgica de las lesiones calcificadas. El control de dípteros, junto con las pruebas de alergia y la desensibilización en los casos recurrentes, suelen estar indicados.
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Consulte también el contenido para veterinarios sobre el complejo granuloma eosinofílico en los caballos.
