Cómo elegir a un hámster

Al elegir a un hámster como posible mascota, comience por observar su entorno. ¿Parece y huele a limpio? ¿La comida parece fresca y los recipientes de alimentación están limpios? ¿Hay suficientes botellas de agua para el número de animales en la jaula? ¿Están los recipientes de agua limpios y sin manchas ni depósitos de materias extrañas? ¿Los hámsteres parecen sanos? ¿Tienen los ojos brillantes? ¿Están alerta y curiosos? Los hámsteres son más activos durante la noche, por lo que es posible que desee considerar la selección de su nueva mascota a última hora de la tarde o durante la noche.

Sostenga suavemente al animal que está considerando. La mayoría de los hámsteres que se han sostenido desde pequeños no muerden. Tenga cuidado con cualquier mascota potencial que tienda a morder. Mientras sostiene al hámster, mire cuidadosamente sus ojos. Los ojos deben estar limpios y el hámster debe estar alerta. Revise las orejas, las patas y el pelo. No debe haber ningún signo de lesión, las uñas de los pies deben estar intactas y bien recortadas, y el pelo debe estar limpio y sin signos de ácaros, pulgas, tiña u otras enfermedades. Revise la grupa para detectar cualquier signo de problemas. Evite los animales que muestren signos de diarrea, secreción sanguinolenta, irritación de la piel u otros problemas. Se debe comprobar si hay babeo o baboseo excesivo, o cualquier diente saliente que pueda indicar un problema dental. Una vez que se haya examinado la salud general del animal, se coloca al hámster en un área confinada donde pueda moverse. ¿Se mueve el animal con normalidad? No elija un animal que cojee o sea reacio a moverse. Pregunte sobre las devoluciones si el animal no está sano después de la compra.

Si no tiene una jaula para su hámster, considere pedirle al vendedor que le guarde a su nueva mascota durante un día para que pueda establecer un hogar adecuado. Tener la jaula lista para su nueva mascota hará que la transición a su hogar sea menos estresante para el hámster.