Los ratones domésticos (nombre científico Mus musculus) se originaron en las regiones central y meridional de Asia. Debido a que son muy adaptables, se han extendido por todo el mundo. Los ratones domésticos fueron domesticados por europeos y asiáticos que comenzaron a criarlos selectivamente por su pelo y color.
Los ratones se han utilizado para muchos propósitos a lo largo de los siglos. Los ratones fueron utilizados en rituales religiosos desde el año 1100 a. C. por los chinos, que se refirieron a ellos como los "antiguos". Los japoneses creían que los ratones eran mensajeros de los dioses. Los griegos los usaban para predecir el futuro e incluso los adoraban. Los marineros y los mineros los usaban para probar la calidad del aire en submarinos y minas. Los científicos modernos los usan para estudiar la genética y las enfermedades. Incluso se han enviado al espacio.
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