Más de 9 especies de Eimeria y una de Isospora infectan a los cerdos en América del Norte. El problema es mundial y probablemente está infradescrito. Isospora suis infecta a los lechones y se encuentra en hasta el 90 % de las explotaciones, con un 25 % a >50 % de las camadas afectadas. Eimeria spp rara vez infectan a los neonatos, pero se encuentran en los cerdos de más edad. La coccidiosis en los cerdos se considera mejor como una de las dos entidades clínicas dependientes de la edad. Un tipo se da en lechones neonatos debido a I suis y a menudo se producen infecciones intercurrentes. La mayoría de Eimeria spp parecen tener baja patogenicidad para los neonatos. El segundo tipo, debido a Eimeria spp, se da en cerdos de más edad, incluso en cerdas jóvenes. También infecta a los jabalíes. Ambos tipos están presentes en los distintos sistemas de producción en todo el mundo y pueden tener importantes consecuencias económicas.
Etiología de la coccidiosis en cerdos
El agente causal de la coccidiosis en lechones suele ser Isospora suis. La mayoría de Eimeria spp tienen baja patogenicidad (causan aproximadamente el 5 % de las infecciones) o no se producen en este grupo de edad.
Los lechones neonatos recogen ooquistes esporulados infectados de un ambiente contaminado. La invasión inicial es del tercio craneal del yeyuno. Isospora suis tiene 3 fases de replicación asexual y una sexual. Las generaciones sucesivas de merontes se producen en las partes más distales del intestino delgado e invaden el ciego y el colon. Los merontes de tercera generación se producen en 4-6 días y los ooquistes aparecen primero en las heces alrededor de los 5 días, continuando hasta el día 8 o 9, con una segunda oleada desde el día 11-14. Los ooquistes excretados pueden volverse infecciosos en 12-24 horas a 25-35 °C. Son viables durante >10 meses.
Los cerdos mayores y los lechones destetados están infectados por varias Eimeria spp, principalmente en el intestino delgado, como E debliecki (a menudo la más común), E neodebliecki, E perminuta, E polita, E porci, E scabra, E spinosa, E suis y E szechuanensis. Muchas Eimeria spp tienen una distribución localizada. Eimeria debliecki infecta principalmente el intestino delgado y más tarde el colon en menor grado. El periodo prepatente es de unos 7 días. Eimeria neodebliecki afecta a la porción media del yeyuno, con un periodo prepatente de aproximadamente 6-8 días.
En los lechones, la infección comienza en el intestino delgado craneal y progresa a la mitad distal del intestino delgado a medida que se desarrollan las distintas fases. Las lesiones de atrofia de las vellosidades aparecen 5 días después de la infección y se resuelven 10-14 días después de la infección. Los cerdos de más edad también tienen infección en el intestino delgado; la distribución y extensión del daño varía con la especie de Eimeria.
Epidemiología de la coccidiosis en cerdos
La infección por Isospora suis se produce en los lechones en todos los sistemas, desde la producción intensiva de interior hasta la producción extensiva en exterior. Los lechones están expuestos principalmente a los ooquistes de otros animales en instalaciones de parto y cría contaminadas. La enfermedad es más grave cuando la infección se contrae al principio de la vida. Los suelos de rejilla limpiados a fondo reducen o previenen las enfermedades. Las cerdas rara vez eliminan especies de I suis, aunque la infección puede ser introducida en un nuevo lote por las cerdas portadoras. La infección posdestete también proviene de un entorno contaminado. Sin embargo, las cerdas pueden portar Eimeria spp y transmitirlas a su descendencia. Los cerdos mayores pueden ser infectados por las cerdas, y la enfermedad debida a E scabra puede aparecer a las 4-8 semanas y más tarde. La infección puede entrar en una explotación sin experiencia inmunitaria a partir de jabalíes o de la introducción de nuevas cerdas. Igualmente, las cerdas nuevas que entran en una explotación infectada pueden mostrar enfermedad clínica.
Después de la exposición a I suis, la inmunidad es potente. Los cerdos expuestos a la mayoría de Eimeria spp adquieren buena inmunidad, pero en los adultos a menudo se ve reforzada por bajos niveles de infección. Puede haber una excreción de ooquistes en el periparto.
Hallazgos clínicos de la coccidiosis en cerdos
En los lechones, la infección se produce con mayor frecuencia a los 5-15 días de edad. Los lechones afectados desarrollan diarrea que varía desde una consistencia cremosa y pastosa o heces blanquecinas hasta una diarrea amarillenta acuosa profusa. Los infectados están más delgados que sus homólogos de la misma edad y permanecen delgados y peludos durante varias semanas. Los lechones gravemente afectados mueren, con tasas de mortalidad de hasta el 20 % en los sistemas de interior y exterior. Después de la infección, el crecimiento reducido puede continuar.
En los cerdos de más edad, la infección suele ser leve. Los enfermos desarrollan diarrea, que puede ser espumosa, mucoide o acuosa, con emaciación. Los signos clínicos a menudo comienzan 9-12 días después de la infección. Algunos cerdos siguen teniendo retraso en el crecimiento.
Lesiones post mortem
En los lechones, el intestino delgado está a menudo flácido, con un contenido que varía de acuoso a líquido cremoso. Las lesiones consisten en un engrosamiento de la pared, con un revestimiento necrótico limitado a la pared yeyunal e ileal. A menudo, el cuerpo está delgado y deshidratado. El examen histológico muestra un gran número de merozoítos y gametocitos masculinos y femeninos en la pared intestinal. Hay atrofia de las vellosidades, reducción de las vellosidades, ulceración focal, aumento de la actividad mitótica en el epitelio de las criptas y, en los casos graves, enteritis fibrinonecrótica con fases de desarrollo de coccidios en el epitelio.
En los cerdos de más edad hay lesiones inflamatorias locales con esfacelos en el yeyuno y el íleon. Histológicamente, la atrofia de las vellosidades es moderada y, en las puntas de las vellosidades, hay material fibrinonecrótico.
Diagnóstico de la coccidiosis en cerdos
A menudo, los signos clínicos se desarrollan antes de que los ooquistes estén presentes en las heces. La edad de los lechones afectados y la falta de respuesta al tratamiento antimicrobiano ayudan al diagnóstico, al igual que la presencia de ooquistes en las heces. Los ooquistes suelen estar presentes en gran número. Los ooquistes pueden detectarse con solución saturada de cloruro de sodio o glucosa. Los ooquistes pueden identificarse por su tamaño, forma y características de esporulación. Si los cerdos mueren precozmente sin presencia de ooquistes, la tinción de los frotis de impresión de la mucosa del yeyuno y el íleon puede proporcionar un diagnóstico rápido.
Se producen fases asexuales de desarrollo. Pueden ser necesarios cortes histológicos. También pueden emplearse pruebas de anticuerpos fluorescentes y PCR. En los cerdos de más edad, el diagnóstico se suele establecer lentamente después de la falta de respuesta a los agentes antibacterianos, aunque el manejo y los antecedentes de la granja pueden ayudar.
Suele haber muchos ooquistes fecales presentes. La especiación implica el uso de dicromato de potasio para esporular los ooquistes y puede ayudar a determinar el control.
Los hallazgos post mortem ayudan a establecer el diagnóstico. Los frotis por impresión de las áreas afectadas muestran fases de desarrollo de los coccidios. El examen histológico del intestino delgado caudal muestra lesiones y etapas asexuales y sexuales del ciclo biológico.
En los lechones, las muestras fecales pueden usarse para diferenciar los diagnósticos más probables a esta edad. Estos incluyen la enterotoxemia por Clostridium perfringens de tipo A, la toxina de la enterotoxemia por Clostridium perfringens de tipo C, la colibacilosis entérica, el rotavirus, la gastroenteritis transmisible (GET) y los criptosporidios. La inanición y el aplastamiento pueden determinarse en la exploración post mortem.
En los cerdos de más edad, el muestreo fecal es la principal herramienta diagnóstica. La salmonelosis y la disentería porcina pueden determinarse mediante cultivo bacteriológico. Las infestaciones por helmintos muestran presencia de huevos. Por lo general, los cambios de alimento y los problemas de manejo se pueden determinar a partir de los antecedentes.
Tratamiento de la coccidiosis en cerdos
Todos los corrales y salas de partos se han de limpiar a fondo, y deben desinfectarse los alojamientos interiores con desinfectantes eficaces. Las áreas al aire libre han de estar bien drenadas y reubicarse regularmente. Las soluciones electrolíticas administradas oralmente son útiles y probablemente deban administrarse individualmente.
En los lechones, los afectados clínicamente y los demás de la misma camada o grupo deben recibir tratamiento anticoccidial.
Pueden usarse sulfamidas. Puede usarse sulfametacina (sulfadimidina) en el agua de bebida, pero por lo general debe administrarse individualmente. La sulfaquinoxalina puede ser eficaz. Puede ser útil la sulfonamida y la trimetoprima inyectable u oral.
Para el tratamiento con amprolio de los cerdos clínicamente afectados se administran 10-25 mg/kg, PO, durante 4-5 días, y al resto del grupo 10 kg en premezcla al 25 % por tonelada de alimento para disminuir la eliminación de ooquistes.
El toltrazurilo (20 mg/kg, PO, una vez) puede ayudar en los animales infectados. En los cerdos de más edad es importante determinar las causas y mitigarlas (disminuir el hacinamiento, retirar a los cerdos de las zonas contaminadas, etc.).
Puede usarse la monensina a razón de 100 g/tonelada de alimento con resultados variables.
Prevención y control de la coccidiosis en cerdos
Es esencial que todas las áreas de parto y alojamiento se limpien, se desinfecten e incluso se limpien con vapor. Algunos desinfectantes a base de amoníaco destruyen los ooquistes, pero solo se pueden utilizar en las zonas abandonadas por los animales. Las áreas deben estar secas y, en la medida de lo posible, los periodos de barbecho deben mantenerse antes de continuar la ocupación. Los corrales limpios han de permanecer vacíos el mayor tiempo posible. Los sistemas exteriores deben tener todo el alojamiento y el equipo limpios y desinfectados, y las áreas del suelo deben estar bien drenadas y se han de reubicar con frecuencia.
El control de la coccidiosis en lechones recién nacidos infectados por I suis es difícil y poco fiable. Se recomiendan y se utilizan en el campo los coccidiostáticos en la alimentación de la cerda durante varios días o algunas semanas antes y después del parto, pero los resultados son variables. Se ha descrito la administración de coccidiostáticos a los lechones recién nacidos desde el nacimiento hasta el destete, pero es difícil garantizar una ingesta suficiente.
La monensina (100 g/tonelada de alimento de la cerda) se utiliza desde antes del parto hasta el destete; sin embargo, se ha demostrado experimentalmente que su uso es ineficaz para la prevención de la coccidiosis en lechones.
La sulfadimidina (100 g/tonelada de alimento) puede administrarse a las cerdas desde que entran en las salas de parto hasta el destete.
El toltrazurilo (20 mg/kg, PO, una vez) está registrado en algunos países para la prevención de la coccidiosis en lechones de 3-5 día de edad y se ha demostrado que disminuye la excreción de ooquistes, la incidencia de diarrea y la pérdida de peso en lechones con coccidiosis inducida experimentalmente. El diclazurilo (5 mg/kg, PO, una vez) se está investigando como tratamiento anticoccidial en lechones.
Experimentalmente, una vacuna que contiene la proteína de unión de los esporozoítos de I suis se usa aparentemente con éxito, pero no hay nada disponible comercialmente.
Para los cerdos de más edad, la limpieza a fondo y, si se permite, el uso de fumigación con bromuro de metilo o amoníaco a una concentración final del 2 % destruyen los ooquistes. La limpieza con vapor, el aumento de la temperatura a 65 °C durante al menos 15 minutos o las pistolas de llama también destruyen los ooquistes. El cloruro de amonio y el hidróxido de sodio disponibles comercialmente se usan para destruir ooquistes.
La sulfadimidina puede añadirse al alimento (100 g/tonelada) y debe administrarse a las cerdas desde que entran en la zona de partos hasta el destete.
El uso de amprolio a la dosis de tratamiento tiene resultados variables. Se recomienda la alimentación con una premezcla al 25 % a razón de 10 kg/tonelada de alimento.
La administración de monensina a la dosis de tratamiento ha producido resultados mixtos. La alimentación con 100 g/tonelada de alimento para cerdas durante 7-10 días antes del parto y durante 2 semanas después del destete puede disminuir la excreción de ooquistes en los cerdos después del destete.