Enfermedades o signos clínicos en ganado vacuno lechero que pueden estar relacionados con las características de la ración o déficits nutricionales

Signo

Posible causa nutricional o dietética

Abortos

Se han observado deficiencias de oligoelementos o vitaminas, especialmente selenio, cobre, zinc, vitamina A o vitamina E

Anemia

Posible carencia de cobre o cobalto en bovinos adultos; deficiencia de hierro en terneros jóvenes (improbable en ganado adulto)

Ceguera y ceguera nocturna

Puede ser un signo inicial aislado de polioencefalomalacia; puede estar asociado con un déficit de vitamina A, con o sin signos de opacidad corneal

Dilatación y vólvulo gástrico

El consumo de pastos de leguminosas o raciones ricas en almidón finamente molidas (como las que se suministran frecuentemente al ganado vacuno de cebo) son predisponentes; el ganado no adaptado a estas raciones es particularmente sensible al timpanismo espumoso

Signos del SNC

Incoordinación, ceguera, nistagmo, sacudidas y opistótonos pueden estar asociados con polioencefalomalacia; raciones ricas en almidón con inactivación microbiana de la tiamina y raciones ricas en azufre como las asociadas con alimentación abundante de granos de destilería y solubles; intoxicación por nitrógeno no proteico (urea)

Defectos congénitos

Déficit de vitamina A, manganeso o cobre

Convulsiones

Signos de carencia de vitamina A, especialmente si aparecen intermitentemente intercalados con periodos de actividad normal en terneros en crecimiento

Ovarios quísticos

La insuficiencia energética y la cetosis subclínica asociada al principio de la lactación son predisponentes; se especula con que la carencia de vitamina E y selenio pueden contribuir; pérdida excesiva o rápida de condición corporal al principio de la lactación debido a deficiencias en la dieta, proteínas o combinaciones.

Diarrea

Numerosos factores dietéticos, incluyendo los cambios bruscos de alimentación, especialmente los asociados con el aumento de los carbohidratos no fibrosos y la fermentabilidad ruminal de la dieta; pastos jóvenes exuberantes de crecimiento rápido y aumento de las concentraciones de proteína o sal en la ración

Abomaso desplazado

Causas tanto metabólicas como nutricionales; la alimentación debe prevenir la cetosis y estimular el consumo elevado de materia seca; tanto las raciones preparto como las posparto son importantes en el manejo; la hipocalcemia y la cetosis subclínica son problemas predisponentes.

Disnea

Neumonía intersticial atípica asociada con el traslado del ganado de pastos pobres a pastos exuberantes; asociado con la conversión ruminal de triptófano a 3-metil indol

Hígado graso

Exceso de condición corporal durante el final de la lactación o durante el periodo seco acompañado de una ingesta deficiente de alimento al final de la gestación y al principio de la lactación.

Tetania hipomagnesémica

Carencia funcional y absoluta de magnesio; el riesgo aumenta con el consumo de pastos exuberantes, especialmente con altas concentraciones de potasio

Inapetencia

Muchas carencias nutricionales (proteína, minerales y vitaminas) finalmente dan lugar a una reducción del consumo de alimentos.

Incoordinación (ataxia)

Ceguera y tambaleo asociados a la intoxicación por azufre (anteriormente considerada intoxicación crónica por selenio); desmielinización asociada a la deficiencia de cobre; hipocalcemia subclínica.

Infertilidad

La energía es el nutriente más claramente asociado; las insuficiencias de caroteno o manganeso pueden afectar a la función ovárica

Cetosis

Deficiencia de glucosa por gluconeogénesis insuficiente junto con una excesiva movilización de lípidos; el exceso de condición corporal al final de la gestación y la ingestión insuficiente de alimentos al principio de la lactación son las principales influencias nutricionales.

Laminitis

Se cree que la laminitis crónica o aguda y sus secuelas son el resultado de raciones con altas concentraciones de carbohidratos no estructurales (azúcar y almidón); fermentación excesiva del intestino grueso de los carbohidratos no estructurales de la dieta (fuentes de almidón que evitan el rumen)

Fiebre de la leche (paresia posparto)

Fracaso de la homeostasis del calcio más que por el déficit de calcio en la ración; control suministrando raciones bajas en calcio o dietas acidogénicas antes del parto

Pica y consumo de tierra

Las causas comunes no están bien determinadas; implicadas la deficiencia de sodio, potencialmente la deficiencia de fósforo y las raciones bajas en fibra

Polioencefalomalacia

Relacionada con la destrucción ruminal de tiamina o con la producción ruminal de sulfuro de hidrógeno asociada a las raciones ricas en azufre; más común en los cebaderos que en el ganado lechero

Membranas fetales retenidas

Una serie de deficiencias nutricionales que dan lugar a una función inmunitaria comprometida son predisponentes; equilibrio energético/proteico negativo antes del parto que da lugar a problemas metabólicos

Raquitismo y osteomalacia

Consumo insuficiente de calcio, fósforo o vitamina D

Acidosis ruminal, clínica aguda

Por lo general se asocia con errores importantes o irregularidades en el suministro de alimentos en los que se produce una ingestión elevada de almidón en el ganado no acostumbrado a tales raciones; asociado con la formación de ácido láctico en el rumen con caídas severas del pH ruminal

Acidosis ruminal, subclínica crónica

Asociada con raciones de lactación con altas concentraciones de carbohidratos no fibrosos y bajas concentraciones de fibra; también se asocia con concentraciones ruminales elevadas de ácidos grasos volátiles y pH ruminal ≤5,6 durante periodos prolongados a lo largo del día

Problemas de la piel

Problemas como pelo apagado y quebradizo, hipotriquia, fácil pérdida de pelo, hiperqueratosis, piel fina y mala cicatrización pueden estar asociados con problemas nutricionales; carencias de vitamina A, de cobre y zinc, desnutrición proteica y energética generalizada

Muerte súbita

Deficiencias de vitaminas A o E, selenio o cobre; las deficiencias de vitamina E y selenio pueden estar asociadas con miodegeneración nutricional cardiaca

Inmunidad suprimida

La inmunodepresión generalizada, tanto de la inmunidad celular como de la inmunidad humoral, puede producirse debido a la desnutrición; las carencias nutricionales específicas incluyen vitamina A, vitamina E, zinc, cobre y selenio; también la desnutrición generalizada de proteína y energía

Toxicidad

Muchas intoxicaciones asociadas con tóxicos presentes en los alimentos; incluyendo nitratos, cianuro, muchas micotoxinas, plantas tóxicas, urea

Urolitiasis

Raciones con alto contenido en fósforo y relativamente bajo contenido en calcio y alto en potasio que inducen orina alcalina (estruvita); la deficiencia de vitamina A puede ser predisponente; las concentraciones bajas de fibra que minimizan el flujo de saliva pueden ser predisponentes; la elevada ingestión de oxalatos, silicatos o calcio puede predisponer a otros tipos de cálculos

Pérdida y retraso del crecimiento

Signos de muchas carencias nutricionales, así como de enfermedades crónicas como el parasitismo interno; el déficit de cobalto es una causa bien documentada de mal aprovechamiento del alimento consumido en ganado vacuno; la desnutrición proteica y energética siempre debe evaluarse

Enfermedad del músculo blanco (miodegeneración nutricional)

Déficit dietético de selenio o vitamina E